Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid han llevado a cabo un estudio acerca de las propiedades cardioprotectoras del ajo negro envejecido. El resultado de este estudio probado en ratas, ha sido publicado en la revista Journal of Functional Foods y demuestra que el alimento conocido por ajo negro, atenua la disminución de la contractilidad cardíaca tras un infarto de miocardio. En el mismo, la empresa, Pharmative Biotech S.L. ha llevado también a cabo dicho estudio y determinan los efectos cardiovasculares de este alimento. El ajo negro muy utilizado como condimento en la cocina asiática, es utilizado de igual forma en Europa y Norteamérica y se obtiene a partir de un ajo común mediante el proceso de envejecimiento acelerado controlando parámetros de humedad y temperatura.
El efecto vasodilatador del ajo en las arterias coronarias y la administración del mimso antes y después de un proceso isquémico (infarto) previene la disminución de la contractilidad cardíaca inducida por este.
Los científicos administraron el extracto de ajo negro seco a segmentos de aorta en un sistema de baño de órganos, para valorar su reactividad vascular. A altas dosis se indujo la vasodilatación, aumentaron la liberación del óxido nítrico (NO) tanto en las dosis bajas como en las altas y se comprobó tras un análisis de la expresión de marcadores inflamatorios y de estrés oxidativo la función beneficiosa tanto en el tejido arterial como en el cardíaco.
Entre estos alimentos, el ajo (Allium sativum L.) tiene una sólida reputación desde hace siglos en diversas culturas por sus propiedades antitrombóticas y antihipertensivas. Estas últimas se deben, al menos en parte, al principio activo S-alil-cisteína (SAC), que reduce el estrés oxidativo e inflamatorio y potencia la liberación de sustancias vasodilatadoras como el óxido nítrico (NO) y el sulfuro de hidrógeno (H2S). Ambas sustancias son producidas por las células del endotelio vascular y cumplen una función importante en la regulación del tono vascular. Por otro lado, se comprobó que la administración del extracto de ajo negro no solo disminuyó la expresión de los marcadores sino que aumentó los marcadores antiinflamatorios y antioxidantes. Este resultado se ha obtenido mediante la hormesis, fenómeno que media los efectos farmacológicos de algunas sustancias medicinales,
