Jueces argentinos condenados por delitos de lesa humanidad

En una sentencia sin precedentes, cuatro ex magistrados que se encontraban en el banquillo de los acusados durante el IV juicio por delitos de lesa humanidad en la provincia argentina de Mendoza fueron condenados a Perpetua, informa ALC Noticias.

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Se trata de Otilio Roque Romano, Guillermo Max Petra Recabarren, Luis Francisco Miret y Rolando Evaristo Carrizo. Hubo otras ocho condenas a la pena máxima, mientras que cinco volverán a su casa porque tres fueron absueltos y dos recibieron una pena menor de tres años y condicional. El resto de los 28 imputados recibió condenas que van de los 20 a los 6 años.

El abogado querellante por el Movimiento Ecuménico de derechos Humanos-MEDH, Pablo Salinas, sostuvo que “este es el juicio más importante en la historia de la provincia de Mendoza”.

El letrado aseguró que “se trata de un juicio muy importante porque se juzga la responsabilidad civil, y resulta clave porque es el primero que llega a un veredicto sobre todo el aparato de la justicia Federal, teniendo en cuenta el siguiente juicio a los magistrados en Córdoba, y que está pendiente el juicio a los magistrados en San Luis”.

Todos los jueces fueron condenados como partícipes necesarios. A Romano lo condenaron por 84 casos de secuestros, 38 tormentos y 33 homicidios. Y Miret por 9 hechos de secuestros, 3 tormentos y 7 homicidios.

De esos números, consigna Página 12, se desprende un dato clave de este juicio: un cambio de criterio para entender el funcionamiento de la justicia en la dictadura. Los cuatro jueces llegaron a juicio acusados por omisión de investigar y de denunciar hechos que conocían por sus roles, pero fueron condenados por participación primaria en los crímenes.

Esto sucedió porque durante los más de tres años de juicio, fiscales y querellas buscaron demostrar que lo que hasta entonces se veía como una “no acción” o una omisión de investigar crímenes o denuncias, en realidad fue una acción activa que garantizó la impunidad.

Otro dato del juicio es que los jueces no fueron condenados por un caso o una serie de casos, sino por la intervención en un período de tiempo: es decir, un tipo de práctica.

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