¡Vuela, Paloma, vuela!

Querida colega:

Te has marchado sin hacer ruido una vez más. Esas alaracas que suenan a menudo cuando algo no va del todo bien no sonaron contigo. Seguías haciendo tu trabajo en silencio sin darte importancia; ese que más querías, sin decirle ni a propios ni a extraños que tu enfermedad un día de estos te iba a jugar una mala pasada.

paloma-gomez-borrero ¡Vuela, Paloma, vuela!
Paloma Gómez Borrero junto al Santo Juan Pablo II

Paloma Gómez Borrero, ¡valiente mujer!  Aprendiste a recorrer el mundo durante veintinueve veces, se dice pronto y a contarnos como periodista; la primera corresponsal en el extranjero de la televisión nacional qué se cocían en los pucheros del Vaticano. Excorresponsal de RTVE, durante treinta años estuviste ligada a COPE, en  donde supiste distinguir perfectamente tu trabajo y la gran misión que te había sido encomendada; relatar día a día el extenso papado de San Juan Pablo II y de Benedicto XVI, además de haber retransmitido tres cónclaves.

El 25 de marzo la voz del Vaticano enmudeció y junto a ella la de cientos de compañeros que apenas podían articular palabra. En Radio Nacional, todos los que recibieron la noticia quedaron quietos. Una música invadía la sección que hubo empezado apenas unos minutos antes pero no se podía continuar. Era el respeto de unos acordes que iniciaban tu despedida. Con ella, los contertulios de 24 horas comenzaron a contar las historias de la historia de Paloma.

Compañera de viaje de San Juan Pablo II, recorriste durante 104 viajes, 160 países. Testigo de cargo de Benedicto XVI con quien viajabas en el mismo avión, pudiste contarnos también cómo fue la elección del papa actual, Francisco hace tan solo cuatro años.

Nadie sabía que te estabas yendo. Todos recordaban con cierto orgullo haberte conocido y haber compartido contigo una parte de su vida. La tuya solo fue la de una mujer generosa y capaz. Capaz de enfrentarse a los cambios y a las vicisitudes del misterio del Vaticano. Con respeto y siempre con la verdad, escribiste varios libros y anécdotas de un papa Santo, total nada. En tus últimos años, colaborabas para EsRadio, en el programa Amigas y Conocidas y en varios programas de TVE, Telecinco y Antena 3 y eras la voz de varios programas de televisiones latinoamericanas. Todos los premios de tu carrera son pocos si hablamos de un reconocimiento que hoy llega al mundo que ya no puede escuchar tu voz. El Rey emérito, Don Juan Carlos, te concedió la Cruz de la Orden de Isabel la Católica, y el papa Juan Pablo II, te reconoció como Dama de la Orden de San Gregorio Magno. Esos junto otros galardones, Premio Iris Toda una Vida de la Academia de Televisión, Premio Calabria, Premio Bravo de Radio, Bravo Especial a una trayectoria, concedidos por la Conferencia Episcopal así como otros que fueron reconocidos por la APM y de Mensajeros de la Paz.

Y hoy, Madrid, tu ciudad natal, se vuelve oscura y gris en esta primavera recien iniciada y te despide con gran tristeza. Se ha ido la dama del Vaticano; la señora de la ciudad eterna, la periodista número uno. Ese lugar en donde nos hiciste vibrar cuando había que hacerlo y llorar cuando nos contabas con pena qué estaba sucediendo. Viviste con el anhelo de una estudiante cada crónica y traslabas en tus palabras la fuerza y la intensidad de tu amor por la profesión más bonita del mundo. Has vivido 82 años pero no has llegado a estar jubilada. ¡De esto no te jubilas nunca, hija! la información va por tus venas y ahora, en este momento ya puedes seguir conversando con ellos. Es curioso, pero ¡qué honor haber sido la elegida! Tendrás que dosificar tus crónicas ahora porque se te va a acumular el trabajo.

¡La vida, inmensa vida la que pudiste disfrutar! Tenemos el orgullo de poder contar que pasarás a la historia del periodismo de las mujeres; esas que se hicieron un hueco por mérito propio en aquella España en donde las chicas tenían poco o nada que decir. Tu voz se escuchó y se escuchará siempre. Precursora de la información y profesora del alma. El mundo de la prensa está hoy de luto y los que te escuchábamos no tenemos nada que decir. Todo está dicho por ti; y cuando miremos  de nuevo al cielo; ese cielo azul que tiene siempre Madrid, te veremos allí sentada en el lugar en donde solamente están los que hacen el bien. ¡Gracias por tu trabajo, gracias por enseñarnos a amar con devoción la profesión!

Total ná…

Descansa en paz ya.

Ana De Luis Otero
PhD, Doctora C.C. Información - Periodista - Editora Adjunta de Periodistas en Español - Directora Prensa Social- Máster en Dirección Comercial y Marketing - Exdirectora del diario Qué Dicen - Divulgadora Científica - Profesora Universitaria C.C. de la Información - Fotógrafo - Comprometida con la Discapacidad y la Dependencia. Secretaria General del Consejo Español para la Discapacidad y Dependencia CEDDD.org Presidenta y Fundadora de D.O.C.E. (Discapacitados Otros Ciegos de España) (Baja Visión y enfermedades congénitas que causan Ceguera Legal) asociaciondoce.com - Miembro Consejo Asesor de la Fundación Juan José López-Ibor -fundacionlopezibor.es/quienes-somos/consejo-asesor - Miembro del Comité Asesor de Ética Asistencial Eulen Servicios Sociosanitarios - sociosanitarios.eulen.com/quienes-somos/comite-etica-asistencial - Miembro de The International Media Conferences on Human Rights (United Nations, Switzerland) - Libros: Coautora del libro El Cerebro Religioso junto a la Profesora María Inés López-Ibor. Editorial El País Colección Neurociencia y Psicología https://colecciones.elpais.com/literatura/62-neurociencia-psicologia.html / Autora del Libro Fotografía Social.- Editorial Anaya / Consultora de Comunicación Médica. www.consultoriadecomunicacion.com Actualmente escribo La makila de avellano (poemario) y una novela titulada La Sopa Boba. Contacto Periodistas en Español: [email protected]

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