Al laureado escritor Álvaro Mutis, en su despedida al éter, a quien conocí cuando fuimos colaboradores del más grande comunicador de la historia, Álvaro Gálvez y Fuentes, en aquellos tiempos del programa cultural y periodístico “Encuentro”. Nuestro sincero pésame a su esposa, hijas, demás familiares y amigos.
Con la fuerza de la razón y con la fuerza de ser la presidenta de Brasil, “un país democrático y rodeados de naciones democráticas, Dilma Rousseff, denunció en la tribuna más alta del mundo el espionaje que realiza, en violación al derecho internacional, Estados Unidos, en prácticamente todo el planeta.
Nunca antes, que nosotros recordemos una mujer con la investidura presidencial, guardando las formas de la diplomacia, había lanzado la más grave reprimenda a la gran potencia del norte.
La presidenta brasileña no se anduvo con rodeos, ante la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas, ONU, denunció con dureza la política de espionaje de Estados Unidos, a la cual calificó de “quiebre del derecho internacional” y propuso un control multilateral del uso de Internet.
Antes Rousseff, como es del dominio público, había suspendido su visita de Estado a Washington programada para el 23 de octubre, al considerar que el reclamo a Estados Unidos por el espionaje que realizó, inclusive hasta la Casa Presidencial, jamás fue satisfecho por la potencia; así era de suponerse por la misma prepotencia de la que siempre hace gala y escarnio.
En ese contexto, llamó a Naciones Unidas a “reglamentar como corresponde la conducta de los estados en cuanto a la utilización del internet y de las nuevas tecnologías”, al resaltar que las revelaciones de espionaje global de Edward Snowden ex experto de la Agencia Nacional de Seguridad; NSA por sus siglas en ingles, provocaron “enojo y repudio entre la opinión pública del mundo”.
“Semejante injerencia es un quebrantamiento del derecho internacional y una afrenta a los principios de las relaciones entre los países, especialmente si son amigos”, enfatizó la mandataria sudamericana y agregó: “La soberanía de un país nunca puede basarse en detrimento del derecho de otro país”, ya que así no puede haber relaciones adecuadas entre las naciones”.
Brasil sabe cómo defenderse, clarificó Dilma Rousseff, “porque somos un país democrático, rodeado de países democráticos”. De acuerdo señora presidenta.
