La guerra infinita. Tres marinos a la mar… Y otros tres en busca van

‘Tres marinos a la mar… Y otros tres en busca van’. Yo lo recuerdo como ‘Tres marinos en la mar… Y otros tres que en busca van’. No importa. O sí. Es como yo lo recuerdo, no como me dicen que fue.

¿De qué nos suena esto? Esto de hacer más caso a quienes dicen haber estado en un sitio en un momento determinado que a quienes se han ocupado de estudiar con las herramientas de los historiadores un hecho, un acontecimiento, un periodo, un tiempo pasado. Esto de primar la memoria de aquellos en quienes confiamos sobre los conocimientos de aquellos a quienes deberíamos creer.

‘Tres marinos a la mar… Y otros tres en busca van’ era un juego. Supongo que lo seguirá siendo. Un juego similar al escondite. Un enorme escondite que permitía jugar en un ámbito tan grande como La Riachuela y alrededores, allí en Suances, aquel lugar.

La guerra no lo es. No fue un juego. No lo es, salvo cuando jugamos a la guerra. Pero aquella guerra, la de 1936 a 1939, no lo fue. Y menos su resultado final, el franquismo.

Yo jugaba de niño con mis primos en Suances a ‘Tres marinos a la mar… Y otros tres en busca van’. La guerra había dejado su poso sobre tantas cosas cuando nosotros jugábamos y Franco aún vivía. La frase correcta es: “La guerra seguía dejando su poso sobre tantas cosas cuando nosotros jugábamos PORQUE Franco aún vivía.”

No sé si los niños de Suances, o de cualquier otro sitio donde se haya jugado a ‘Tres marinos a la mar… Y otros tres en busca van’, siguen jugando a ese escondite magnífico, pero quiero creer que la guerra, aquella guerra llamada Civil -incivil, mejor dicho-, ya terminó. Aunque parezca mentira.

En abril de 1939 terminó, por vez primera; con el último maquis muerto ya en los años sesenta volvió a finalizar; y ya definitivamente pareció acabar para siempre cuando en 1982 los herederos políticos de los derrotados en el 39 llegaron al poder. Hoy pareciera que los muertos, algunos muertos, siguieran esperando. Pero empezamos a estar ya verdaderamente agotados de esperar el fin.

José Luis Ibáñez Salas
Editor de material didáctico para diversos niveles educativos en Santillana Educación, historiador y escritor. Director de la revista digital de divulgación histórica Anatomía de la Historia, es autor de El franquismo, La Transición, ¿Qué eres, España?, La Historia: el relato del pasado y La música (pop) y nosotros (publicados los cinco libros por Sílex ediciones), fue socio fundador de Punto de Vista Editores y escribe habitualmente relatos (algunos de los cuales han aparecido en el blog literario Narrativa Breve, dirigido por el escritor Francisco Rodríguez Criado) y artículos para distintos medios de comunicación, como la revista colombiana Al Poniente o las españolas Nueva Tribuna, Moon Magazine y Analytiks. Tiene escrita una novela y ha comenzado a escribir otras dos.

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