“Premiere”. Sombras de Bohemia

I stole away into the night
Hoping things would work out right
Paul Simon “That’s why God made the movies”

premiere-cartel-600x332 “Premiere”. Sombras de Bohemia

Luis de Luis[1]

“Nadie deja que le arrebaten fácilmente sus sueños, se aferran a ellos, para darles calor” dice Paul Simon en una de sus canciones y esa es, en última instancia, la historia que Verónica Mey cuenta en “Premiere”.

Esta es la historia de la noche en que Jara, una directora de cine brillante que celebra su primer éxito – el que le deja en la rampa de salida de la consagración – junto a quienes le han acompañado durante el camino: Myriam, su amiga de juventud; Mati, su confidente y mano derecha y Nico, su novio y primer actor.

Esta es la historia de una noche que comienza bañada en euforia y alcohol mientras estallan, inevitablemente contagiosos, los “na-na-na” de “Rumore” de Raffaela Carrá y acaba blanqueada en decepción y resaca.

Esta es la historia de adanes y evas al vestido que se desnudan ante el público. “Premiere” es una función que trabaja con un material emocional de calibre, con sentimientos de alto voltaje, un material engañosamente sencillo que manejado sin conocimiento, sobriedad o sabiduría puede patinar en el melodrama, la cursilería o la atroz banalidad.

No digo nada que Verónica Mey no supiese y que no haya intentado evitar dirigiendo con firmeza su honesto, brillante y descarnado texto logrando que fluya inadvertida una intricada puesta en escena que responde a una reveladora pregunta que se oye durante la función : “¿A que juegan los niños cuando se apaga la luz?”  y se hace eco de un lamento que resuena desolador “¡Estoy harta de no ver, de no verme y de que no me vean!”.

Serán Verónica Larios, Manu Hernández, Raquel Meleiro y Jordi Gimeno quienes encarnarán a esos niños que no ven en la oscuridad. Interactúan, se enfrentan, se retan y afrontan, se explican. Se cargan de razones, se anegan de remordimientos, se culpan y absuelven.

Verónica Larios sabe trasladar toda la pasión contenida bajo la aparente frialdad y distancia de Jara, la diva triunfadora; Manu Hernández, sabe ser el bufón histriónico que oculta sueños largamente acariciados;  Raquel Meleiro empapa de ternura y desvalimiento su papel de niña perdida y un Jordi Gimeno, arrebatado e intenso, conmueve con el gradual despojamiento de su personaje, un presuntuoso que pide a gritos ayuda

No caben blancos, ni negros en esta función. En cada gesto, en cada mirada, en cada palabra son resplandecen las sombras, las sombras de bohemia.

Ficha artística

  • Dirección y dramaturgia: Verónica Mey
  • Reparto: Verónica Larios, Manu Hernández, Raquel Meleiro y Jordi Gimeno
  • Producción: Good Plays
  • Funciones comentada: 11 de noviembre de 2018 en los Teatros Luchana de Madrid
  1. Luis de Luis es crítico teatral

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