Somos gente honrada, solo parados

En Coruña, Suso y Manuel, dos padres de familia en la cincuentena y amigos de toda la vida, se encuentran sin trabajo y sin dinero. Cuando la situación es prácticamente insostenible se produce el milagro: en un día de pesca se encuentran un paquete con diez kilos de cocaína. Los amigos deciden comenzar a vender la droga para conseguir salir de la miseria. Pero el dilema moral no es su único problema: ¿qué saben ellos del mundo de los dealers y los consumidores?

cartel-somos-gente-honrada Somos gente honrada, solo paradosCon fondo de crisis, otra historia más de perdedores. Somos gente honrada (aquí un recuerdo para la inefable Los ladrones somos gente honrada de los inolvidables José Isbert y José Luis Ozores), película que se estrena en las salas españolas el 14 de junio de 2013 -muy promocionada porque supone la incorporación a la producción cinematográfica de dos personajes populares, José Corbacho y Andreu Buenafiente- es la ópera prima del gallego Alejandro Marzoa, interpretada por el andaluz Paco Tous y el también gallego Miguel de Lira, arropados por sus respectivas “familias” (Manuela Vellés, Unax Ugalde, Marisol Membrillo y un niño rubio muy guapo y como mudo).

Mejor intencionada que resuelta, la película parece que va a abordar el más que delicado tema de los parados “seniors” españoles que, junto a los jóvenes que todavía no han conseguido estrenarse en un trabajo, forman el grueso de ese 27% de la población que ha echado el cierre al futuro. Pero solo lo parece, porque luego se dedica a la anécdota del hallazgo y el intento de venta de la droga. La secuencia cumbre de la película es el “momento Padrino”, cuando los protagonistas irrumpen en la fiesta de cumpleaños del capo que va a comprar la mercancía.

Al final, los amigos y compinches de Somos gente honrada vuelven a su rutina de matar el tiempo saliendo a pescar e inventando la vida que querrían, comprando en la lonja la lubina que no han pescado.

Mercedes Arancibia
Periodista, libertaria, atea y sentimental. Llevo más de medio siglo trabajando en prensa escrita, RNE y TVE; ahora en publicaciones digitales. He sido redactora, corresponsal, enviada especial, guionista, presentadora y hasta ahora, la única mujer que había dirigido un diario de ámbito nacional (Liberación). En lo que se está dando en llamar “los otros protagonistas de la transición” (que se materializará en un congreso en febrero de 2017), es un honor haber participado en el equipo de la revista B.I.C.I.C.L.E.T.A (Boletín informativo del colectivo internacionalista de comunicaciones libertarias y ecologistas de trabajadores anarcosindicalistas). Cenetista, Socia fundadora de la Unió de Periodistes del País Valencià, que presidí hasta 1984, y Socia Honoraria de Reporteros sin Fronteras.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.