El ministro de Asuntos Exteriores irlandés, Simon Coveney, afirmó que su país puede reconocer el estado palestino «en caso de que no se registre un avance en las negociaciones de paz entre Palestina e Israel».
«Preferimos ‘no reconocer por ahora’ el estado palestino, pero si sigue esta impotencia en el curso de diálogo, nos veremos obligados a revisar nuestra posición por razones obvias, como será el caso de otros muchos países de Europa», aclaró Coveney, durante una rueda de prensa conjunta con su homólogo palestino, Riad al Maliki, de visita oficial en Dublín el lunes 23 de septiembre de 2018.
Coveney anunció que su país subirá a siete millones de euros la cantidad de ayuda de 4,5 millones de euros de Irlanda a Palestina.
Israel ha calificado a Irlanda como el país europeo «más propalestino». El Senado de Irlanda ratificó el pasado julio un proyecto para prohibir la importación y venta de bienes y servicios producidos en los territorios palestinos ocupados. Se da la circunstancia que también hizo lo mismo con los productos procedentes del Sahara, ocupado por Marruecos. Es el primer país de la Unión Europea en tomar esta medida.
Precisamente la Liga Árabe ha instado a España a reconocer oficialmente a Palestina. El secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abulgueit, instó el lunes 24 a España a reconocer Palestina como un Estado independiente para «animar» a otros países europeos a hacer lo mismo y mantener viva la solución de los dos Estados.
De los actuales 28 miembros de la Unión Europea reconocen a Palestina, Suecia, Chipre, Malta y la mayoría de los países del Este, desde antes de su entrada en la UE, Polonia, Rumania, Chequia, Eslovaquia y Hungría.
Palestina está reconocida por un total de 139 países y es estado observador no miembro de la ONU desde 2012, aunque se le denomina como estado de Palestina en sus documentos, y forma parte como miembro de pleno derecho de distintas organizaciones internacionales como la Unesco, FIFA, COI o la Corte Penal Internacional.