Ganadora del premio del Jurado Joven de la Academia del Cine Europeo, “Good Bye Berlin” (Tschick) es una road movie en la que dos adolescentes forjan su amistad en un viaje inolvidable. Dos amigos, un viejo coche robado y un verano que cambiará sus vidas, adaptación de la novela homónima de Wolfgang Herrndorf (que ha vendido más de dos millones de ejemplares en 25 países, entre ellos España, y ha ganado varios premios literarios) y dirigida por el turco alemán Fatih Akrin (“Al otro lado”, “Contra la pared”).
Fábula adolescente para todas las edades, “Good Bye berlin” nos cuenta las aventuras veraniegas con un coche robado de Maik (Tristan Göbel) y su compañero de clase Andrej, o Tschick (Anand Batbileg), un inmigrante ruso y marginado, aprovechando que la madre de Maik se encuentra en una clínica de rehabilitación para alcohólicos y el padre está en “viaje de negocios”.
Un viaje, animado por una vieja cassette de Richard Claydeman, en el que los dos muchachos se sienten realmente libres, sobre el que planea en un muy segundo plano el fantasma de la homosexualidad.
Divertida y en algunos momentos melancólica, la película “Good Bye berlin” es un canto a la adolescencia y una oda a la amistad, y a la forma en que se enfoca cuando sus protagonistas están libres de los prejuicios que van acumulando la edad y las experiencias vitales.