Volvamos a las escenas sencillas que nos muestran qué hacer ante las dudas y entre secuencias de todo calado. Nos surgen vencimientos que hemos de tener presentes con luces que nos aparten de las sombras. Probemos para dar con la eficacia más alta.
Nos hemos de caracterizar para compartir y progresar sin juegos inútiles. Intentemos descubrir lo que sensiblemente nos mejora, Abundemos sin reparos. No dejemos de esforzarnos.
Reforcemos las experiencias con los suaves tonos de un aprendizaje que nos cuidará con conservantes afines. Nos regalaremos abonos para que los campos que nos rodean sirvan de veras. Nos revolucionaremos.
Contemos los minutos para dar con los ejes de una verdad más y más compacta. Nos diseñaremos con diversiones y docencias. Todo tiene muchas aristas, muchas caras: hemos de indagar en las óptimas.
El momento
Surge el momento. Compruebas, comprobamos. Haces, hacemos, que sea fácil todo cuanto sucede. Nos educamos en ti. Eres el mejor modelo. La era que representas es espléndida.
Nos manejamos con tu arte. Nos ponemos a improvisar para dar con los toques que consideramos maestros. Nos formamos.
Ya no vamos a la deriva. Nos enseñamos a ser personas. Nos regalamos buenos tiempos. Nos hemos preparado para esta estructura.
Hemos emprendido singladuras de paciencias y de tolerancias respecto de cuanto fue. Nos hemos aleccionado.
Nos acogemos en una buena situación. Ya no estaremos tristes. Hemos comprendido que la voluntad nos conduce desde la buena intención y con equilibrio, de vuelta a la consideración mayor en forma de hogar.
Extinguimos los malos ratos y los convertimos en amistades profundas que nos proporcionan cantar con toda la pasión de siempre. Lo que fue en el pasado ahora huele a futuro. Nos enseñamos a tocarnos con registros y huellas de realidades no fingidas.
Nos aseguramos lo que hemos de emprender con eficiencia desde el paso más marcado. Nos insistimos para no aparecer en la rutina misma.
Vamos adelante. No cunde el pánico ni en las dificultades. Nos demoramos, pero somos, por fortuna, en el instante acertado. Nos construimos en los lenguajes que ignoran la derrota.
Nos despertamos ante el nuevo día, y somos en lo que fue y en lo que volverá. Nos llamamos: vamos a la cita establecida. Es lo que tiene que ser.
Escudriñemos. Las intensas humedades se pueden combinar con las semillas que nos brindan actividades densas y productivas. Conseguimos los remedios cuando nos trasladamos con recetas confiadas. Toca ponerlas en práctica, claro.