La Federación Internacional de Periodistas (FIP) y su afiliada, el Sindicato Nacional de Periodistas de Filipinas (NUJP) han hecho pública la condena a una ocurrencia del presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, cuando en una conferencia de prensa el 1 de julio 2021 le pidió a un periodista que se quitara la mascarilla y el protector facial cuando le hiciera una pregunta.
La conferencia de prensa fue la primera del presidente Duterte desde febrero de 2021 y se llevó a cabo para inaugurar la Línea dos del Tranvía Ligero. La reportera de TV5, Maricel Halili, fue la primera reportera en intervenir y después de presentarse y comenzar a hacer su pregunta, Duterte la interrumpió dijo que no podía entender lo que decía y le indicó que se quitara la mascarilla y el protector facial: «Solo quítatelo. Tengamos covid juntos».
En el medio digital Rappler se indica que «Halili fue perfectamente audible, al menos a través del video en vivo del evento». Irónicamente, el 21 de junio el propio Duterte implementó una regla que establece que se deben usar máscaras y protectores faciales obligatorios tanto en áreas interiores como exteriores debido a los temores que rodean la propagación de la variante del virus Delta COVID-19.
La protección contra la COVID-19 ha sido una tarea difícil para los periodistas durante la pandemia. El NUJP comentó que muchos corresponsales han tenido que adquirir su propio equipo de protección personal y encontrar formas de hacerse la prueba.
La NUJP considera que «si bien Duterte y sus allegados tienen fácil acceso a las instalaciones médicas y las vacunas, muchos trabajadores de los medios de comunicación no. De hecho, muchos de nuestros colegas todavía están esperando para completar su vacunación y muchos otros aún no han recibido su primera dosis».
La FIP sostiene sobre este incidente que «lLas acciones del presidente Duterte durante esta conferencia de prensa fueron atroces e hipócritas. Establecieron un precedente abismal para proteger la salud y la seguridad de los periodistas durante la pandemia. Instamos al presidente a reevaluar su enfoque para comunicarse con la prensa y respetar sus propias reglas».