“Zapatos rojos” contra la violencia de género.
El 25 de noviembre, por desgracia sigue siendo un día de memoria social y duelo por todas aquellas mujeres que ya no podrán recorrer su camino personal en libertad, debido a que un hombre machista maltratador sistemático, les quitó la única vida que tenían y que solo les pertenecía a ellas. La última ayer mismo, degollada en un coche en la estación de La Serna en Fuenlabrada, se llamaba Alía Díaz García tenía 26 años y trabajaba de peluquera ¡Cuánto dolor y rabia!
Como sigamos así, igual empieza a verse normal que los novios lleven navajas por si acaso creen que la novia es infiel, se visten como ellas quieren, trabajan porque ellas quieren… y en definitiva quieren hacer su vida en libertad ¡señores y señoras del Gobierno qué nos están matando!
Del feminicidio y el asesinato de mujeres se habló el pasado 22 de noviembre, día en que se presentó en el Centro cultural Conde Duque en Madrid, un avance del informe de “Feminicidios y otros asesinatos de mujeres 2010-2015” realizado por la plataforma Feminicidio.net interviniendo: Graciela Atencio, María del Mar Daza, Inma Ramos (P´nitas), Amelia Tiganus y Loreto de la Carrera. Presentó el acto Ana Buñuel Heras, Directora General de Igualdad entre Hombres y Mujeres del ayuntamiento de Madrid, el cual ha apoyado este informe.
“Personalizar y humanizar a las víctimas más allá de los datos, para llegar a su reparación social” Graciela Atencio.
“Una de cada diez víctimas mortales de violencia de género no está reconocida en las cifras oficiales” Desde Feminicidio.net, las cifras de mujeres asesinadas por el mero hecho de serlo, duplican las cifras oficiales de víctimas mortales por violencia de género.
Este informe recoge entre 2010 y 2015, 586 feminicidios(86%) y 95 asesinatos de mujeres (14%) frente a los que considera el Estado español como oficiales que son 354 o sea el 51,98 % debido a que la Ley Orgánica 1/2004 de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género solo reconoce los crímenes machistas de mujeres en el marco de la pareja o expareja, pero éstos alcanzan más allá de este ámbito.
Por eso amplían el registro, aunque son conscientes de las dificultades teóricas y prácticas de utilizar este tipo de definiciones, que según Feminicidio.net es necesario como forma de contribuir al debate sobre la necesidad de reconocer el feninicidio en toda su amplitud, pues las leyes y la justicia no alcanzan a todos los crímenes de mujeres por violencia machista patriarcal.
En dicho informe distinguen varios tipos de feminicidio según la razón de género que subyazca y además lo diferencia del asesinato. Así, recogen 390 feminicidios íntimos (hombres que asesinan a la mujer con la que mantienen o mantenía una relación), 90 feminicidios familiares (que tienen que ver con el parentesco familiar) de los cuales 50 hijos asesinaron a sus madres, 51 no íntimos (hombres desconocidos como los agresores sexuales), 31 feminicios intantiles (asesinato de niñas por un hombre responsable de la menor) y 22 feminicidios por prostitución (en lo referente a trata, tráfico, transfobia, lesbofobia, racismo, asesinato sexual sistémico) y que en este periodo hubo “tres feminicidas seriales”.
De entre los asesinatos, el que destaca es el que se produce por robo, que en el periodo de 2010 a 2015 se produjeron 51 casos el 7%.
También distinguen el asesinato por mutilación genital femenina y el feminicidio como crimen internacional.
Graciela Atencio periodista coordinadora de Feminicio.net propuso medidas como: Ante la desigualdad y discriminación son necesarias políticas de igualdad en relación con el hombre. Analizar las denuncias, qué funciona de la Ley Integral, qué medidas se toman con las mujeres que están vivas, prevención, educación, justicia y reparación, la importancia de reconstruir la memoria histórica de todas las mujeres asesinadas desde 2010 personalizando los datos y humanizar a las víctimas más allá de los mismos.
Lo han hecho desde “Zapatos rojos. Instalación virtual duelo público, memoria social” por Inma Ramos (P´nitas).
“Hay que escuchar a las víctimas de violencia de género, tenemos que abrir los ojos, los oídos, el corazón, quienes mejor saben lo que les pasa son ellas, pero no saben por qué les pasa, pues la realidad viene disfrazada de amor y esto no explica la realidad del femincidio” lo dijo en su exposición María del Mar Daza jurista criminóloga en el SAVA (Servicio de Atención a las Víctimas de Andalucía durante 10 años) en Granada.
También apuntó que para el posmachismo no hay violencia de género, hay violencia aislada o patológica, el machismo se disfraza de igualdad formal no sustancial.
Destacar de su intervención el dato de la denuncia cruzada, se produce cuando la víctima denuncia y el victimario también lo hace, y en estos casos los datos indican que ni siquiera se acordaron medidas de alejamiento, con lo que esto puede significar…
Apuntó que hay que seguir trabajando, cada persona desde sus ámbitos, que hace falta un cambio social importante y acabar con el mito del amor romántico.
La intervención de Amelia Tiganus una mujer valiente, activista feminista y defensora de los derechos humanos de las mujeres, recuperó su identidad desde cero después de haber sido explotada sexualmente durante 5 años en el Estado Español. “Nadie me escuchaba cuando yo quería contar el sufrimiento que sentía, pero cuando se habla de puta feliz sí, eso sí se escucha”. “Estoy muy emocionada y agradecida porque desde Feminicidio.net me dan voz”.
Reseñó que entre los puteros se encuentran los misóginos, que en la prostitución hallan el “lugar perfecto” para su odio. En el registro de feminicidios de 2016 son 5 por prostitución. De este tipo de casos destacan la saña y brutalidad con la que los ejercen, pues son sometidas a más de un acto violento.
Propuso medidas: “Educar a la sociedad en sensibilidad, a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, no se confía en ellos, porque no están concienciados y es difícil. Sería apropiado formar brigadas de mujeres policías que intervengan en los clubes, porque los hombres policías pueden haber pagado el día anterior, y porque todos los hombres son potenciales puteros. Sensibilización en colegios e institutos, que se eduque para que no consuman prostitución, lo último que quiero es que estos adolescentes piensen que van a tener a su disposición cuerpos de mujeres…” Expresó que “las mujeres queremos ser libres para desarrollar nuestra identidad como sujetos de derecho. Espero que el informe sirva para construir relaciones más igualitarias”
En la actualidad, la activista Amelia ha reconstruido su vida y desarrolla su trabajo de sensibilización y prevención de la trata y la prostitución, además de impartir cursos y talleres en Feminicidio.net. Un proyecto social del que forma parte desde 2015 y a través del cual transmite su mensaje y su lucha: «No podemos hablar de igualdad entre hombres y mujeres, ni de justicia social, ni de la sociedad del buen trato, mientras exista una sola mujer en el mundo explotada sexualmente».
Después de asistir a la presentación de este informe y aumentar mi consciencia sobre los feminicidios y asesinatos de mujeres agradezco al equipo de Feminicidio. Net y todas las personas que han apoyado la plataforma con trabajo y esfuerzo, así como a todas las personas mujeres y hombres que trabajan y se implican con el logro de una sociedad más afectuosa, igualitaria y justa.
Pero como se siga por el camino de eludir el desarrollo de la inteligencia afectiva, confundiendo amor con obediencia, se siga normalizando la violencia como forma de resolver conflictos y se siga instrumentalizando mercantilmente a la mujer para diversión de los hombres como algo normal… ¿se imaginan a dónde vamos a llegar?
“La industria del sexo llama a los hombres a usar a las mujeres como objetos con agujeros donde clavar penes y dedos, mientras ellas se disocian para sobrevivir emocionalmente” Jeffreys (2002), en el libro “El putero español” Águeda Gómez Suárez, Silvia Pérez Freire y Rosa María Verdugo Matés.