Los nuevos monstruos de la comedia francesa
Tras su paso por la quincena de realizadores del festival de Cannes, ha llegado este verano a las pantallas comerciales la última película del joven cineasta francés Romain Gavras “Le monde est à toi” (El mundo te pertenece) una comedia de gánsteres, que es el resultado de contradictorias influencias cinematográficas, que van de Quentin Tarantino a John Landis o la tradición de la muy loable comedia a la italiana.
Hijo del veterano director Costa Gavras y de la productora Michelle Ray Gavras, Romain Gavras ha buscado, desde sus comienzos en el mundo del cine a temprana edad, romper el cordón o la referencia familiar afirmando su propio estilo tanto en sus cortometrajes como en la realización de clips musicales, o publicitarios.
Su opera prima en 2010 fue la muy provocadora “Notre jour viendra”, en donde abordaba de forma iconoclasta temas como el racismo, la intolerancia y la búsqueda absoluta de la libertad, con un tono cáustico y acido humor. Sus protagonistas eran los actores Vincent Cassel y Olivier Barthelemy.
Con “Le monde est à toi” nos ofrece ahora una obra más ambiciosa tanto en su factura como en su presupuesto de producción, que incluye un reparto de lujo, en el que reincide con su amigo Vincent Cassel, pero también con actores tan conocidos como Isabelle Adjani, Philippe Katherine o Francois Damiens.
Del mundo de la droga en esas zonas urbanas fuera de la ley, en las grandes capitales de Francia, al mundo bling-bling de las mafias de la droga en la costa española de Benidorm, asistimos a las aventuras de François, hijo de una madre posesiva, mitómana y ladrona, Isabelle Adjani, de la que intenta escapar montando un negocio legal de compra venta en Marruecos.
Pero por falta de recursos financieros, François se ve implicado en una trama de trafico de drogas que le conduce a España, junto con su amigo y examante de su madre, Henry (Vincent Cassel) patético perdedor obsesionado por las teorías del complot universal.
La revelación de Karim Leklou, la presencia de Adjani y Cassel
Si la presencia de Adjani y Casssel, superestrellas del cine francés, es sin duda el atractivo comercial que ha permitido el montaje de este proyecto, a mi juicio el verdadero valor añadido y revelación de la película reside en su protagonista, el actor Karim Leklou, (quien se dio a conocer en 2011 en el reparto de “un profeta” de Jacques Audiard), pero también en la participación en el reparto de la niña Gabby Rose.
El personaje de Karim Lekloub es sin duda lo mejor de la película, en lo que acerca la obra de Romain Gavras a los monstruos de la comedia italiana, a la cáustica comicidad de Scola o Monicelli. Su personaje, François, es un perdedor, hijo de mama, sometido y reprimido, que nos hace pensar por momentos en el gran Alberto Sordi, y que a medida que se ve acosado va a desarrollar su picaresca para sobrevivir y liberarse definitivamente del yugo materno.
El personaje de la niña del gánster inglés en Benidorm, Gabby Rose, hubiese merecido un mayor desarrollo pues es tan patético y logrado como el de Karim Lekloub. Dos personajes que se encuentran en un momento dado en la mejor secuencia cómica del film. Ambos personajes son el mejor hallazgo de este guion, coescrito por Gavras con sus cómplices Noé Debré y Karim Boukercha, que presenta mas estereotipos que verdaderos personajes, en su fácil caricatura o parodia de la delincuencia versión Scarface.
El resultado final es una película cómica, eficaz, con más acción que emoción, y mucho más asequible a un amplio público que lo fue en su día “Notre jour viendra” (Nuestro día llegará). “Le Monde est à toi”, me ha interesado, aunque no me ha convencido totalmente, por las razones antes evocadas, pero no cabe duda de que el día del éxito ha llegado para Romain Gavras, con este su segundo largometraje.