*Luis de Luis
Allá por el 2002 el escritor Mark Haddon publicó la novela de título tan sugestivo como intrigante [1]“El curioso incidente del perro a medianoche”. Desde su salida al mercado el libro consiguió ser el sueño de todo escritor (y , especialmente, de todo editor) y se convirtió en esa rara avis del mundillo literario que es el best seller de calidad; es decir, la novela que accede a todo tipo de público lector, la novela a la que es imposible ponerle un pero o un por qué no, la novela, al fin y al cabo, que además de tener credibilidad y respaldo de la intelligentzia, se convierte en un todo fenómeno de ventas consolidado a lo largo de los años.
Un fenómeno de ventas editorial no se conforma, claro está, con ser solo eso; es, por así decirlo, carne de cañón para que se trasvase a oros medios. Así, tras fallidos intentos para lograr una versión cinematográfica se decidió hacer una versión teatral pero no una versión cualquiera, tendría que convertirse en un acontecimiento, en la obra que hay que ver, y, para ello, nada mejor que seguir el camino del libro: lograr un producto de prestigio, con un, por así decirlo también, acabado de alta gama. Conseguir, en suma, un lujo, una experiencia, un evento.
Así las cosas, se encargó al prestigioso autor teatral Simon Stephens la adaptación. Con sensatez, respetó la trama, resaltó los aspectos humanos y emocionales de la trama y agudizó los conflictos de la historia de Christopher Boone, un niño autista trata de encontrar(se) su lugar en el mundo o en, lo que es lo mismo, la pequeña comunidad del barrio residencial en el que vive.
Además, Stephens resolvió con inteligencia la voz narrativa de la novela (todo el texto se cuenta en la cabeza del protagonista) repartiéndola entre los diversos actores. La producción estuvo a la altura para lograr con un inverosímil ( por lo extraordinario) despliegue de efectos especiales que el espectador perciba las sensaciones de Christopher Boone.
La apuesta era, aun así, más que arriesgada lo que no impidió que “El curioso incidente del perro a medianoche” recibiese 5 premios Tony (Broadway) y 7 premios Olivier (Londres) además del refrendo masivo del público.
Es la misma propuesta que ha aterrizado en el Teatro Marquina de Madrid para reunir, como se suele decir, a lo mejor de cada casa, desde el gran Gerardo Vera (que ha conseguido una escenografía tan espectacular como intimista) a Jose Luis Arellano que ha logrado exprimir toda ( y es mucha) humanidad del texto, pasando por la asombrosa Joven Compañía que compone un reparto ajustadisimo junto con ilustres veteranos como Carmen Mayordomo y el joven Alex Villazán, que se pone la función a sus espaldas con la seguridad y firmeza de un consagrado y con la inocencia e ilusión de quien comienza.
“El curioso incidente del perro a medianoche” es una enorme función, deslumbrante y conmovedora, íntima y desbordante, espectacular y cercana que se ofrece como una experiecia y un acontecimiento. Y lo es.
*Luis de Luis es crítico teatral.
[1] Salvo para los aficionados a Sherlock Holmes ya que la citada frase es una de la más recurrentes del corpus holmesiano . Pertenece al relato “Estrella de Plata” y para quien interesarle, el “curioso incidente” consistía en que el susodicho perro no hizo lo que se esperaba de él; es decir, ladrar.
Ficha artística
- Basada en la novela de Mark Haddon.
- Autor de la adaptación:Simon Stephens
- Dirección escénica:José Luis Arellano García
- Adaptador del texto:José Luis Collado
- Escenografía: Gerardo Vera
- Elenco Álex Villazán, Marcial Álvarez, Lara Grube, Mabel del Pozo, Carmen Mayordomo, Anabel Maurín, Boré Buika, Eugenio Villota, Alberto Frías y Eva Egido