El organismo mexicano de derechos humanos Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos «Todos los Derechos para Todas y Todos» (Red TDT) ha sido galardonado en la Universidad de Alcalá de Henares por su trabajo en defensa de los derechos de las personas.
Al acto acudió la secretaria ejecutiva de la Red RDT, Agbieszka Raczynska, quien aseguró en su discurso que este galardón permite “mirar de manera diferente la labor de los defensores y defensoras de derechos humanos, nos fortalece y anima a continuar el camino que hemos elegido para construir un México distinto, un México con una sociedad de rostro más digno, donde la vida vale y la dignidad de las personas impera por encima de los intereses particulares”.
El galardón lo recibieron de manos del Rey Juan Carlos, quien destacó que “la generosidad y la dedicación de estos hombres y mujeres son especialmente valiosas, pues constituyen el recurso fundamental para lograr unos objetivos que tantas veces parecen inalcanzables”
Red TDT se emplea a fondo en numerosas causas, como las relativas a la defensa de los derechos de los pueblos indígenas y de las mujeres, así como en conflictos relativos a derechos económicos, sociales, culturales y ambientales. Además, es la voz de más de 73 organismos del país, empeñados en la misma labor, a quienes apoya en sus reivindicaciones.
Hace unos días, precisamente, condenaba el allanamiento de las instalaciones del Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi, situadas en Coahuila (Estado del mismo nombre) tras lo cual sufrieron el robo de información delicada relacionada con casos de violaciones a los derechos humanos que ha denunciado el centro.
Los hechos denunciados fueron descubiertos el pasado domingo, cuando el personal del centro llegó al trabajo y descubrió un boquete en la pared. Al entrar a la oficina se percataron del desorden en que se encontraba todo el espacio de trabajo. También constataron que materiales y archivos de información altamente delicada de manejo exclusivo para la defensa de los derechos humanos no se encontraba en su lugar y había sido revisado. Finalmente se comprobó la extracción de dos ordenadores que contenían información sensible y de carácter confidencial.
Aseguran que descartan que se trate de un robo común, puesto que en el lugar existían objetos de mucho mayor valor económico, y de fácil acceso, que no fueron sustraídos. Ya en 2012, fuerzas de seguridad del estado mexicano irrumpieron en las oficinas del mismo centro sin contar con una orden judicial, interrogando e intimidando al personal, sin que se hayan esclarecido los hechos hasta la fecha.
Esta es una forma habitual de presionar e intimidar a las organizaciones de DDHH para que desista de sus denuncias o demandas por parte de las autoridades, de la policía y del ejército. No obstante, y a pesar del poco resultado (o nulo) que dan, han exigido a la Procuraduría (fiscalía) General de Justicia del Estado, una investigación amplia y detallada de los hechos en cuestión, así como determinar las responsabilidades para quien o quienes hayan cometido dicha acción en lo referente a su autoría material e intelectual. También se han dirigido a la Secretaría de Gobierno exigiendo condiciones de seguridad suficientes para que puedan trabajar, y a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, para que ellos implementen medidas cautelares. Por supuesto, la Procuraduría les respondió, sin siquiera echar una ojeada el lugar de los hechos, que se trataba de un robo común y corriente.