La gestión de una herencia, más allá de su carga emocional, representa un proceso jurídico y administrativo que requiere precisión, tiempo y una toma de decisiones informada. En ciudades como Valencia, donde las particularidades urbanísticas y legales pueden influir en la transmisión de bienes inmuebles, la correcta administración del patrimonio heredado cobra especial importancia.

Desde el fallecimiento de un ser querido hasta la inscripción de la herencia en el Registro de la Propiedad, el camino está lleno de trámites que conviene conocer. Cada paso exige documentación concreta, coordinación entre herederos y, sobre todo, claridad para evitar errores costosos. Una mala gestión hereditaria puede derivar en disputas, cargas fiscales innecesarias o incluso en la pérdida de derechos sobre ciertos bienes.
Qué implica aceptar una herencia en Valencia
Aceptar una herencia no es simplemente un acto formal: es asumir tanto los activos como los pasivos del fallecido. En Valencia, como en el resto de España, existen dos opciones principales: aceptación pura y simple o a beneficio de inventario. Esta última alternativa permite al heredero proteger su patrimonio personal frente a deudas del causante, un aspecto que no siempre se considera en primera instancia.
Además, en determinados casos, la herencia puede comprender bienes inmuebles con cargas pendientes, usufructos o situaciones registrales complejas. Por ello, antes de firmar cualquier documento conviene revisar con detalle el contenido de la herencia y solicitar asesoramiento especializado.
Documentación esencial y pasos iniciales
El punto de partida es el certificado de defunción, seguido por el certificado de últimas voluntades y la obtención del testamento, si lo hubiera. En ausencia de testamento, se debe tramitar una declaración de herederos abintestato, lo que suele requerir más tiempo y recursos.
Una vez identificados los herederos, se procede al inventario de bienes y deudas. En este momento es crucial valorar con precisión los inmuebles, vehículos, cuentas bancarias o cualquier otro activo a repartir. También deben contemplarse los posibles préstamos, hipotecas o impuestos pendientes que haya dejado el fallecido.
La fase de inventario es determinante para decidir si conviene aceptar o rechazar la herencia, especialmente cuando existen pasivos ocultos o litigios en curso.
Reparto de bienes: acuerdos y escritura de adjudicación
Una vez completado el inventario, los herederos deben llegar a un acuerdo sobre el reparto. En caso de discrepancia, se puede recurrir al procedimiento judicial de división de herencia, aunque esto implica una prolongación del proceso y costes adicionales.
Cuando hay consenso, se firma la escritura pública de aceptación y adjudicación de herencia ante notario. Este documento concreta quién recibe qué y es requisito imprescindible para inscribir los bienes inmuebles a nombre de los nuevos titulares.
En este contexto, resulta esencial contar con información clara sobre los trámites y requisitos. En el caso de las herencias en Valencia, contar con una empresa experta en el ámbito inmobiliario y legal puede marcar la diferencia entre un proceso ágil o uno repleto de inconvenientes.
Impuestos y plazos: lo que no se puede pasar por alto
El Impuesto de Sucesiones y Donaciones debe presentarse ante la Hacienda autonómica en un plazo de seis meses desde el fallecimiento, aunque se puede solicitar una prórroga de otros seis. En la Comunidad Valenciana, este tributo contempla reducciones y bonificaciones específicas según el grado de parentesco, discapacidad o patrimonio preexistente de los herederos.
Una planificación adecuada puede suponer un ahorro fiscal considerable, evitando errores que podrían traducirse en sanciones o recargos por parte de la Administración.
Además, si la herencia incluye bienes inmuebles urbanos, será necesario abonar la Plusvalía Municipal (Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana), cuyo cálculo depende del valor catastral y los años de tenencia del bien.
Herencias con inmuebles: claves urbanísticas en Valencia
Cuando la herencia incluye una vivienda, local o solar, intervienen factores como la normativa urbanística local, el estado de conservación, posibles cargas o el régimen de propiedad (pleno dominio, usufructo, nuda propiedad). Por tanto, antes de aceptar la herencia, conviene solicitar una nota simple registral y consultar el Plan General de Ordenación Urbana si se prevé vender o reformar el inmueble.
En áreas de Valencia con procesos de renovación urbana, como ciertos barrios del centro histórico o zonas periféricas en transformación, es clave evaluar el potencial del inmueble y su viabilidad legal para uso o comercialización.
Venta de inmuebles heredados: implicaciones y oportunidades
Una vez inscritos los bienes a nombre de los herederos, la venta puede ser una opción atractiva, especialmente si se quiere evitar disputas o no se desea conservar el patrimonio. Sin embargo, la transmisión de inmuebles heredados en menos de un año desde la aceptación puede tener implicaciones fiscales relevantes en el IRPF del vendedor.
Contar con una agencia que ofrezca servicios integrales —desde la tasación y puesta en venta hasta la gestión documental— resulta de gran ayuda. Esto no solo permite optimizar el valor de mercado, sino evitar errores comunes al intentar vender un bien heredado sin la preparación adecuada.
Casos frecuentes de complicación hereditaria
Algunos escenarios habituales que entorpecen la gestión de herencias en Valencia incluyen:
- Herencias con varios inmuebles sin división previa.
- Falta de testamento y conflictos entre herederos.
- Bienes compartidos con terceros ajenos a la familia.
- Existencia de deudas desconocidas del causante.
- Retrasos en la aceptación que conllevan recargos fiscales.



