Organizaciones civiles de los estados mexicanos de Chiapas, Tabasco y Yucatán, integrantes de la Red Td , dedicada a tareas de promoción y defensa de los derechos humanos, han puesto en marcha la campaña nacional Defendamos la Esperanza, que tiene por objeto reconocer las acciones de las personas voluntarias que trabajan con ellos.
En el marco de los contextos comunes que caracterizan la referida zona, como es el aumento de conflictividad social, la profundización de la pobreza, la impunidad, la discriminación, y la corrupción que se practican desde los distintos niveles de gobierno, los defensores de DDHH representan uno de los actores de cambio que transforman esta lacerante situación en alternativas de vida y esperanza para este país.
A pesar de los riesgos a que se enfrentan en los estados del sureste, continúan acompañando procesos sociales en defensa del territorio, la autonomía de los pueblos y los derechos de las mujeres y personas migrantes; realizando denuncias de graves violaciones a los derechos humanos cometidas por agentes estatales y no estatales; evidenciando el despojo y daños cometidos por empresas privadas que mercantilizan recursos naturales y minerales y autoridades que privatizan recursos públicos; promoviendo la defensa activa de los derechos civiles y políticos por la misma ciudadanía; haciendo aportes para el diseño de políticas públicas; y evidenciando el falso discurso oficial de respeto a los derechos humanos en el ámbito internacional.
No obstante, esta labor sigue sin ser reconocida en su total dimensión por parte de autoridades oficiales y actores no estatales. Inclusive, tanto los propios trabajadores como sus familiares son objeto de criminalización y difamación permanentes, lo cual aumenta el riesgo de ataques a su integridad
En la referida zona destaca el trabajo en la promoción y defensa de los derechos de los pueblos indígenas; en la protección y defensa a las personas migrantes y refugiadas, ya sea en su ruta de tránsito o bien porque viven en la zona, a quienes se les sigue discriminando; en el acompañamiento a mujeres campesinas, indígenas, defensoras, y feministas que construyen condiciones de equidad e inclusión; en la promoción de los derechos de la infancia y la juventud por la inclusión y reconocimiento de su diversa interculturalidad; y en la promoción y defensa de la libre expresión .
Ante ello, la campaña Defendamos la Esperanza trata de reconocer el aporte invaluable del trabajo de personas que, sin ser parte de una organización, realizan tareas de promoción, defensa y ejercicio de derechos. Además, con esta acción, a Red TDT, hace un llamamiento a las autoridades locales, estatales y federales, a poner fin a la difamación y ataques al trabajo de quienes defienden los derechos humanos en la región y a reconocer el aporte al desarrollo de una sociedad justa y democrática.