En sección oficial: “Quien te cantará” e “In fabric”
Las películas de estos dos directores pasaron antes por la Quincena de realizadores de Cannes, y llegan ahora a la competición de Horizontes Latinos:
“Los silencios” rodada en español en la frontera con Colombia y Perú, por la directora brasileña Beatriz Seigner, es una coproducción con Colombia y con Francia, en este caso con el productor Thierry Lenouvel, experto en coproducciones con América Latina).
“El motoarrebatador”, del argentino Agustín Toscano, es su segunda película, pero la primera en solitario, ya que la anterior “Los dueños” 2013, la dirigió al alimón con su amigo y cómplice tucumano Ezeqiel Radusky.
“El moto arrebatador” es una coproducción con Uruguay y está inspirada en un hecho real que le sucedió a la madre del director, cuando le robaron de un tirón su bolso unos ladrones que circulaban en moto, aunque no tuvo tan graves consecuencias como las que explora en esta ficción.
Sergio, el ladrón de la moto, que es un delincuente con buen corazón, vive en la precariedad y se ocupa de su hijo pequeño en ruptura con su pareja, provocando la caída y hospitalización de Liliana una señora a la que roba y que padece de amnesia tras la agresión sufrida. Sintiéndose culpable va a visitarla iniciándose así una ambigua relación entre esos dos perdedores a los que reúne el azar de la vida, y que se necesitan mutuamente.
“Silencios” de la directora brasileña Beatriz Seigner es una coproducción entre Brasil, Colombia y Francia (cine Sud). Está rodada en español en la frontera con Perú y Colombia en los mágicos decorados naturales de la isla de la fantasía, lugar predestinado para este relato con acentos fantásticos o fantasmagóricos, en el que se cruzan los deportados colombianos del conflicto armado, los vivos con sus muertos, victimas de uno u otro lado.
Con una mezcla de actores profesionales y no profesionales, y con dos niños protagonistas muy bien dirigidos, cuenta la película la llegada a esa isla de una mujer colombiana, cuyo marido ha desaparecido, y es dado por muerto. Con sus dos hijos pequeños una chica muy traumatizada y un niño más bien revoltoso y espabilado, Amparo, la madre, trabaja para sobrevivir y se topa con el fantasma de su marido. En su puesta en escena Beatriz Seigner juega con esa confusión entre lo real y lo mágico, dejando la duda de si la aparición del marido desaparecido es real o imaginaria.
En sección oficial: “Quien te cantará” e “In fabric”
De lo que he podido ver en la competición oficial, me detendré hoy en dos películas de brillante factura estética, pero que no me han convencido por razones distintas.
Crítica social con claves de vampiros
La primera es “In fabric” del británico Peter Stricklan, un insólito relato de cine fantástico, visualmente muy atractivo y original, que con claves paródicas de película de vampiros y de sangrientos crímenes nos habla de nuestra sociedad de consumo que nos controla y nos agobia con sus saldos en los grandes almacenes.
De las campañas publicitarias para atraer al cliente – consumidor a las redes de un sangriento almacén inglés de corte y confección, o al control y acoso de los empleados en sus condiciones de trabajo. Este sistema laboral y de consumo actual que se parece cada día más a las predicciones literarias de Orwell, es evocado con buen sentido del humor con los personajes de un reparador de lavadoras y de una mujer empleada en un banco.
Una parodia pues del sistema capitalista y de la sociedad de consumo a ultranza, con sus gentes haciendo cola a la apertura de la temporada de rebajas, y con un asesino vestido rojo de señora que resulta ser una terrible maldición para el que lo toca. Todo ello en unos almacenes dirigido por un seudo Drácula rodeado de vampiresas.
El guion y el relato me han interesado, aunque encuentro que el tema está demasiado estirado para hacer un largometraje, ya que hay en él muchas repeticiones de efectos y situaciones. En todo caso es reconocible y loable la intención de su autor de intentar la denuncia social remplazando lo social o lo neorrealista por el género de horror.
Discrepo de los elogios ditirámbicos a “Quien te cantará”
“Quien te cantará”, de Carlos Vermut, nombre artístico del madrileño Carlos López del Rey, toma su titulo de una canción del grupo Mocedades (interpretada por Eva Amaral). Película muy esperada y elogiada por algunos en este festival, es una mezcla de melodrama y musical sobre el tema de la usurpación de identidad, que resulta frío y estetizante en su muy cuidada dirección de fotografía y en sus decorados, como una bonita foto de revista en “papier glacé”. No me ha interesado ni en su contenido ni en su forma.
Si en el origen del guion, el tema de la usurpación de identidad, y desdoblamiento de personalidad, muy visitado en grandes clásicos del cine, hubiera podido ser una buena idea, en su desarrollo y tratamiento en cambio me parece mal aprovechado en esa mezcla de géneros entre el musical, lo fantástico y el melodrama.
No me convencen ni sus diálogos, ni la hierática interpretación de Najwa Nimri, transformada en poco expresiva momia egipcia en estilizados decorados, que se supone ha perdido la memoria en un accidente. Brilla en cambio Eva LLorach como actriz en ese papel de fan de la cantante que trabaja en un bar karaoke y que tiene una hija adolescente tan estúpida como violenta (Natalia de Molina). Pero los diálogos entre la cantante y su fan suenan rígidos, recitados o aprendidos, sin duda una opción deliberada del autor, mientras que las secuencias entre la madre y la hija tienen un tono más realista.
Carlos Vermut, cuya carrera empezó en internet con “Diamond Flash en 2011, era muy esperado en esta edición por haber sido el ganador de la Concha de oro a la mejor película y concha de plata al mejor director en 2014 con “Magical girl”.
