Dos investigadores australianos han pedido la retirada de cientos de estudios científicos sobre trasplante de órganos en China porque, «probablemente», se utilizaron órganos de presos ejecutados, lo que es contrario a las reglas éticas de la comunidad científica internacional, según una información del diario británico The Guardian, recogida en el digital francés Slate.
Los australianos Wendy Rogers y Mathew Robertson pedían, en un artículo publicado en la revista médica BMJ Open, la retirada de cuatrocientos estudios científicos sospechosos de haber utilizado órganos de presos chinos sin su consentimiento.
Rogers y Robertson son especialistas en ética médica y han examinado 4453 estudios de trasplantes de órganos en China, efectuados entre 2000 y 2017, y han notado que en el 92 % de los casos no se menciona el origen de los órganos y en el 99 % no se precisa si el donante había dado su consentimiento.
“Habida cuenta de que varias investigaciones han demostrado que las autoridades chinas han extraído órganos de decenas de miles de presos ejecutados, los investigadores australianos deducen que, al menos, cientos de los estudios publicados se basan en trasplantes contrarios a la ética”: “Un gran número de testimonios creíbles –escriben Rogers y Robertson en el semanario Newsweek– sugieren que la extracción de órganos no se limita a los presos condenados, sino que incluye también a los presos de conciencia. Por tanto, es posible, aunque no es verificable, que algunos artículos científicos contengan datos conseguidos de presos de conciencia a los que han matado para conseguir sus órganos”.
Slate cita el ejemplo de la revista médica Liver International, que en 2017 tuvo que retirar un estudio de 564 casos de trasplantes de hígado porque unos expertos demostraron que era imposible que el hospital mencionado hubiera conseguido tal cantidad de órganos procedentes de donantes voluntarios.
Rogers y Robertson han pedido «la retirada inmediata de todos los estudios que citen investigaciones basadas en órganos de presos ejecutados» y la organización de una cumbre internacional para tratar la investigación china en materia de trasplantes.
