La pobreza como condiciones de vida que caracterizan a las personas con escaseces o muchas carencias, en un mundo marcado por la economía capitalista se hereda, igual que se hereda la riqueza de los acaudalados, millonarios, adinerados, acomodados… ¿Y quiénes han podido prosperar en la sociedad capitalista hasta ahora?
Quienes básicamente han tenido parné en sus familias, cuyos contactos han sido con los potentados, y sus posibilidades han continuado o aumentado. O bien quienes se hicieron expertos en pelotear a tiempo completo a los poderes fácticos y no fácticos, aunque también están quienes tuvieron algo de suerte o mucha suerte. Pero a estas alturas de la película tenemos claro que los Derechos Humanos se compran…
Que la pobreza se hereda, lo mismo que la riqueza es una obviedad, lo que no se hereda es lo que se haga con la reflexión o el propio pensamiento y la creatividad. Ya que para que se produzca hemos de poner en juego nuestras capacidades, además de nuestra propia afectividad o inteligencia que por supuesto es afectiva (conciencia y consciencia).
Evidentemente cuanto más entregada esté la peña a la vida digital, caracterizada entre otras cosas por la vigilancia y negocios capitalistas, se irá perdiendo la partida de lo propiamente humano.
Mucus, la inteligencia mocarra en forma de falda camilla esputa:
Al entregar a lo digital, la consciencia y la conciencia
perderemos por lo menos, la creatividad y la sapiencia…