Toyota España ha informado de que ha matriculado su primer vehículo eléctrico de hidrógeno en España y que en 2020 pondrá en circulación una flota de doce Toyota Mirai, en combinación con una primera estación de repostaje de hidrógeno para vehículos de pila de combustible en Madrid.
La empresa automovilística considera que el hidrógeno utilizado como fuente de energía es clave en la lucha contra el cambio climático y los Toyota Mirai son un avance presentado en el marco de la Cumbre del Clima (COP25) como una alternativa de movilidad cero emisiones.
Mirai, que significa “futuro” en japonés, es fruto de más de veinticinco años de investigación por parte de los equipos del grupo Toyota, no emite dióxido de carbono ni contaminantes locales, solo vapor de agua, y el consumidor no debe modificar sus hábitos porque los tiempos de recarga son similares a los actuales.
El objetivo de Toyota es reducir en un 90 % las emisiones de CO2 de sus vehículos nuevos en el año 2050, a comparación de los niveles de 2010.
Toyota España, Enagás, con su filial Enagás Emprende, y Urbaser pondrán en marcha en Madrid, este 2020, la primera estación de repostaje de hidrógeno para vehículos de pila de combustible, un proyecto pionero en España para impulsar la movilidad sostenible basada en esta fuente de energía.
Mirai ha sido reconocido con el distintivo medioambiental Cero emisiones, establecido por la Dirección General de Tráfico (DGT), y que clasifica los vehículos según su potencial contaminante.
El hidrógeno, clave en la lucha contra el cambio climático
Toyota explica que el hidrógeno es el elemento más abundante en el universo. Se encuentra en casi todas partes, desde el agua hasta las plantas, y ya es lo bastante potente como para proporcionar energía a hogares y edificios. Utilizar el hidrógeno como fuente de energía tiene grandes ventajas: es un recurso ilimitado, se puede obtener de manera sostenible, permite su almacenaje a largo plazo y se puede usar en ámbitos muy diferentes.
El hidrógeno es un medio limpio y eficiente para producir electricidad, no vulnerable a las fluctuaciones en la oferta de suministro como el petróleo. Además de no generar emisiones de CO2 al utilizarse, el hidrógeno presenta también una mayor densidad de potencia que las baterías eléctricas y es fácil de transportar y almacenar. Se puede utilizar no solo para proporcionar energía a los vehículos – particulares pero también autobuses, taxis, carretillas elevadoras y otros–, sino también para generar la electricidad de los hogares e, incluso, de las fábricas.