Siempre es común escuchar que el vino requiere de temperaturas especiales, que existen vinos que se almacenan en temperaturas cálidas o vinos que las necesitan frías. Pero ¿has escuchado que los vinos también requieren de una temperatura constante?
De forma tradicional, las bodegas se suelen ubicar en lugares subterráneos, porque logran mantener una temperatura estable y con pocas fluctuaciones en relación con la superficie exterior. Por esta razón, los vinos almacenados en bodegas cuentan con características especiales.
Sin embargo, brindar estas condiciones de almacenamiento a los vinos que coleccionamos en casa es muy complicado. Esta situación ha convertido la compra de una vinoteca en el sueño de los amantes de los vinos.
La temperatura de los vinos no debe aumentar considerablemente
Cuando se acerca el verano las temperaturas comienzan a ascender y los vinos no deben de estar expuestos a temperaturas superiores a 24 °C (75 ˚F), incluso si estos vinos requieren de temperaturas cálidas. Cuando un vino debe almacenarse con temperaturas cálidas, como los vinos tintos, esta temperatura de almacenamiento no debe superar los 18 °C. El problema principal de las temperaturas altas es que cuando el vino supera los 24 °C entra en una fase de oxidación que cambia todas sus propiedades. Para solucionar este problema puedes optar por el uso de una vinoteca.
Las vinotecas pequeñas de Bodega43 cuentan con dos temperaturas diferentes para sus dos áreas de almacenamiento. Es decir, podrás establecer una temperatura constante para los vinos que se almacenarán en frío y otra temperatura constante para los vinos que se conservarán cálidos.
¿Qué pasa si las temperaturas de los vinos descienden durante su almacenamiento?
Cuando un vino se almacena a temperatura ambiente y esta desciende de forma brusca, los procesos de añejamiento, en los vinos que lo permitan, se detienen totalmente. Si degustas un vino almacenado de forma regular en casa y uno almacenado en vinotecas, podrás percibir la gran calidad de los vinos procedentes de vinotecas pequeñas.
El corcho y los cambios de temperatura
Los vinos que se almacenan con temperaturas que varían por debajo de los 5 °C suelen presentar un corcho seco y contraído, dos características que pueden permitir el paso del aire hacia el interior de las botellas. En cambio, cuando el lugar donde se almacena el vino tiene tendencia a elevar la temperatura por encima de 20 °C, se puede apreciar en el corcho una pequeña filtración del vino, es decir, el corcho estará húmedo.
Los expertos recomiendan almacenar vinos con temperaturas constantes, el rango máximo permitido es de 1,5°C (3°F) para cambios de temperatura durante el día. El rango máximo de variación de temperatura para el lugar de almacenamiento de un vino durante el año nunca debe exceder de 2,5°C (5°F).
Una vinoteca BODEGA43 es el producto ideal para brindar a tus vinos un lugar de almacenamiento con temperaturas estables y configurables. Con este tipo de producto podrás escoger que temperatura tendrá cada área de almacenamiento, la cual se mantendrá estable.