El periodista marroquí Omar Radi ha sido trasladado de la prisión Ain Sba de Casablanca donde cumplía condena a la de Tiflet-2, a 150 kilómetros de distancia de su domicilio.
Para su familia, según ha denunciado su padre, Idris, se trata de una «venganza» y un «castigo» tras haberse denunciado por organizaciones internacionales su situación y su juicio injusto, al igual que la apelación de la sentencia, que fue rechazada por el Tribunal de Casablanca.
Omar Radi fue espiado con el programa espía Pegasus y había investigado casos de corrupción.
La familia denuncia que Omar Radi, requiere seguimiento médico ya que padece la enfermedad de Crohn.
La cárcel de Tiflet-2 es una de las más duras dentro del sistema penitenciario marroquí y alberga a radicales yihadistas condenados por su pertenencia al ISIS.
Asimismo también ha conocido el caso de dos suicidios entre los presos.
[…] es la primera vez que Radi sufre represalias en la cárcel de Tiflet-2, una de las más duras de todo el régimen penitenciario marroquí, donde fue trasladado el pasado mes de abril tras […]