Henri Langlois, coleccionista y ardiente defensor del cine mudo, legendario fundador de la Cinemateca francesa, nació en 1914. Con motivo del centenario de su nacimiento, se ha inaugurado esta semana en Paris una exposición titulada “El museo imaginario de Henri Langlois”.
La pasión por el arte y por el cine de ese gran experto y coleccionista son los ejes de esta exposición que su comisario Dominique Paini, define como “Una historia de amor por el cine”. “Una exposición en la que –siguiendo a John Ford y su Liberty Valance- hemos querido evocar la leyenda de Langlois, pues la cinemateca francesa antes de ser una institución administrativa fue el sueño imaginado y dibujado por un poeta. Langlois se había enamorado del cine”.
La escenografia de la exposición propone al visitante un recorrido en siete espacios en este Museo imaginario de Henri Langlois, empezando por una serie de obras de sus amigos artistas, una evocación de su actividad incesante como programador de películas o “difusor de sombras” y una cronología de su vida y de su obra. De sus primeros años como coleccionista y restaurador de cine, al margen de los círculos oficiales, hasta el apogeo de la cinemateca francesa, y el denominado “Affaire Langlois”.
El “Caso Langlois”, tuvo lugar en febrero de 1968, cuando el entonces ministro de la Cultura el gaullista André Malraux –quien había tenido hasta entonces gran complicidad con Langlois- le destituyó de su cargo. Esa decisión, arbitraria e injusta, provocó una ola de solidaridad total en el mundo del cine. Francois Truffaut, Alain Resnais , Jean Luc Godard, Jean Marais y muchos otros tomaron su defensa y el gobierno francés se vio obligado a dar marcha atrás. Se confirmó así la consagración nacional e internacional de Henri Langlois al frente de la prestigiosa Cinemateca francesa, cuya actividad como pionera de la restauración y protección del patrimonio cinematográfico ha sido imitada en el mundo entero.
En el espacio “El hogar de los artistas” se puede descubrir su pasión por el cine y la cultura, y muy particularmente por la pintura y los artistas que habían sido fuente de inspiración para los directores de cine en el entonces naciente séptimo arte. Matisse, Ernst, Miró, Picabia, Man Ray, Leger, Chagall, Picasso, Calder o Andy Warhol, artistas que vivieron como él esa pasión por el nacimiento de la imagen en movimiento. A ver y volver a ver por ejemplo, “Entreacto” de René Clair 1924.
Los dibujos de Henri Langlois imaginando la futura estructura de una cinemateca nacional y las múltiples exposiciones que organizó en su vida para dar a conocer el cine, son el colofón de este recorrido que termina con una proyección de un cortometraje experimental de ocho minutos “El Metro” realizado por Langlois y Franju en 1934.
Acompañando esta celebración se ha programado una retrospectiva de clásicos del cine que empezará este miércoles 9 de abril con la proyección de tres películas: ”El hundimiento de la casa Usher” 1928 de Jean Epstein, “El gabinete del Doctor Caligari” 1919 de Robert Wiene, y “ El legado tenebroso” 1927,de Paul Leni. Este programa es el que inauguró el Círculo del cine (Cercle du Cinéma) fundado por Henri Langlois y Georges Franju en 1935, precursor de la futura Cinemathèque française fundadada en 1936. Su objetivo, decía Langlois “Mostrar las películas, y no discutir después, los debates no sirven de nada. Para marcar esa diferencia nos vamos a llamar: Círculo del cine”
La retrospectiva continuará con un ciclo dedicado a ”Las mujeres de Henri Langlois”, una forma de rendir homenaje a la fascinación de Langlois por las grandes actrices como Mary Pickford, Pola Negri, Louise Brooks, Greta Garbo, Joan Crawford, Renéé Falconetti, Gloria Swanson, Marlene Dietrich, o Ana Karina. En el ciclo “Clásicos del cine” se recoge todo un compendio de películas preferidas de Henri Langlois, que van de “Intolerancia” de Griffith, a “La Inhumana” de Marcel L’Herbier, “Freaks” de Tod Browning, “La regla del juego” de Jean Renoir, “Scarface” de Howard Hawks, “El acorazado Potemkine” de Eisenstein, o “El angel exterminador” de Luis Buñuel, entre otras.
Señalaré por útimo el ciclo dedicado a Charles Chaplin, quien era al parecer el cineasta preferido de Langlois. El personaje de Charlot está así presente en una amplia programación destinada a grande y chicos.
En la presentación en París de estos eventos para rendir homenaje a Henri Langlois, el presidente de la Cinemateca francesa, y director de cine francés Costa Gavras, recordó que como él, Langlois nacido en Izmir, Turquia, también hablaba griego: “Cuando lo conoci en 1955, a veces hablabamos en griego -declaró Gavras- para mi era entonces un personaje inaccesible. Frecuenté la cinemateca de 1955 a 1972, y eso me permitió descubrir la historia del cine, todos los clásicos, pues en Grecia había visto muy poco cine. Langlois y la cinemathèque significaron para mi el descubrimiento del cine”.
Un Comité de honor para celebrar el centenario del nacimiento de Henri Langlois se ha constituido con participación de cineastas y actores del mundo entero, desde Woody Allen a Hou Hsiao Hsien, Francis Ford Coppola, Jean Luc Godard, Manuel de Oliveira, Jeanne Moreau, Steven Spielberg, Wim Wenders, Wong Kar Way y un largo etc.
La influencia de Langlois en la generación de cineastas franceses de la Nouvelle vague fue enorme y reconocida por todos, desde Godard a Truffaut, Rhomer, Rivette o Chabrol. En la programación cabe destacar la proyección de las “Historias del cine” de Jean Luc Godard, apoyado homenaje a a esa memoria del cinematógrafo que representa Langlois.
Las Ediciones Flammarion, que editan el catálogo de la exposición, acaban de publicar también el libro “Escritos de cine” de Henri Langlois, un compendio de sus críticas de cine y semblanzas de sus cineastas preferidos. Cine para leer, con prefacio de Costa Gavras.
- Exposición abierta hasta el 3 de agosto de 2014