Ante los recientes acontecimientos ocurridos en la República Argentina, integrantes de la Red Alternativa de Derechos Humanos de Venezuela (SurDH) se pronunciaron.
Para SurDH la reciente elección presidencial en la República Argentina, ha marcado un giro drástico en la tendencia política que el país sudamericano desarrollará durante los próximos cuatro años.
Felipe García: Argentina 2015La opción que ha resultado favorecida en una ajustada victoria electoral, se ha caracterizado durante su campaña por un manifiesto discurso anti derechos humanos, descalificando las luchas que múltiples agrupaciones de víctimas del terrorismo de Estado han desarrollado durante las últimas décadas, en busca de verdad, justicia y reparación; así como desmeritando los avances que en materia de políticas sociales y de inclusión han desarrollado las tres gestiones gubernamentales que le precedieron (políticas sociales que la agrupación partidista hoy electa nunca apoyó ni acompañó en el espacio legislativo donde se aprobaron).
En esa línea, se ha inscrito el deplorable editorial publicado por el diario argentino La Nación (diario que apoyó contundentemente la campaña del candidato ganador), la cual el día 23 de noviembre (es decir a horas de ocurrido el proceso electoral) se ha despachado con un texto titulado “No más venganza”, en el cual se reivindican las prácticas de vulneración masiva de derechos humanos cometidas por la última dictadura militar, la doctrina de seguridad nacional, la tesis fallida y manipuladora de “los dos demonios” y una apología de la impunidad que supera todos los límites imaginables.
SurDH considera que estas expresiones mediáticas y el enfoque que ha manifestado el candidato electo en materia de derechos humanos, constituyen una ofensa incalificable contra la memoria del pueblo argentino, contra las víctimas directas y sus familiares, y contra todos aquellos que luchan por evitar que se vuelvan a repetir en la historia dichas prácticas de terrorismo de Estado y de exclusión de las grandes mayorías populares.
Tuvieron que transcurrir prácticamente 30 años para lograr que los procesos de verdad y justicia pudieran avanzar, luego de las múltiples estrategias aplicadas por gobiernos anteriores a la etapa del kirchnerismo, que buscaron generar máxima impunidad, a través de las leyes de Obediencia Debida y Punto final.
Hasta ahora ha habido 522 condenados y 57 absueltos, además de 250 sobreseídos o con falta de mérito en la instrucción de los procesos por crímenes de lesa humanidad. Esta proporción indica claramente que no se trata de tribunales populares que ejercen “la venganza”, como ligeramente califica el diario La Nación, sino de procesos judiciales regulares con garantías de respeto al debido proceso y el derecho de defensa.
SurDH hace propias las recientes palabras del luchador social y Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, al decir: “El Nunca Más, significa que nunca más vuelva la impunidad, ni quienes quieren retroceder en los avances de Verdad y Justicia de nuestro pueblo. Y le decimos que no estamos dispuestos a dar ni un paso atrás. (…) los que siempre luchamos por los derechos humanos vamos a seguir defendiéndolos siempre junto al pueblo y frente a cualquier gobierno”.
Finalmente, SurDH se solidariza con el pueblo argentino en esta hora trágica y difícil de su historia, que es en definitiva la historia de todo un continente. Suma sus voces con las de quienes continúan las luchas por construir una Argentina y una América Latina que no excluya a nadie; y ratifica el compromiso con la Patria Grande y la integración por la que han dado la vida miles de compatriotas argentinos y latinoamericanos.
En este artículo de la periodista Ileana Ruiz, queda plenamente demostrado que los pueblos tienen muy poca memoria del pasado y lo que es peor del pasado reciente, pues los hechos acaecidos en la hermana rep. argentina no se suscitaron hace 500 años, dicen que los pueblos tienen los gobiernos que se merecen. pero en realidad no sé por cuanto fue la diferencia de votos. Me viene a la memoria una cita de orwell, tal vez la dijo con otra connotación, pero yo la interpreto a mi manera:»todos los animales son iguales, pero algunos animales son más iguales que otros»