Niños y niñas con estatus migratorio precario no podrán iniciar el curso escolar en Québec (Canadá), según montrealnewswire, que informa de que se ha convocado una concentración de familiares, un día antes de la entrada oficial de las escuelas en 2016, para preguntarle al ministro de Educación cuándo va a abrir las puertas de las escuelas para todos los menores.
Sara (nombre ficticio), madre de tres niños, explica que a ella le dijeron el año pasado que sus hijos no podrían inscribirse en la escuela sin pagar los costos de la escolaridad anuales, que ascienden a más de 18 000 dólares. Finalmente, gracias a la ayuda de trabajadores sociales, los niños pudieron inscribirse sin tener que pagar esta suma, aunque las facturas les siguen llegando.
Otras familias se enfrentan a situaciones incluso más difíciles: al inscribirse en la Comisión escolar Marguerite-Bourgeoys en el 2015, se les informó de que en, ausencia de un estado migratorio admisible, tendrían que disponer del dinero necesario para inscribirla, de lo contrario «no se podía hacer nada por esa niña», testimonia Steve Baird, miembro del colectivo Educación sin fronteras. La niña, finalmente, no pudo integrarse a la escuela.
En noviembre del 2014 el Protecteur du citoyen du Québec recomendó un cambio de la ley, así como la puesta en práctica de medidas temporales antes de la entrada oficial de las escuelas en 2015. A pesar de que el gobierno aceptó las recomendaciones y que un proyecto de ley ha sido debatido, hasta ahora ninguna medida temporal o permanente ha sido tomada para remediar la situación.
«Esperamos que el nuevo proyecto de ley sea adoptado pronto y que garantice el acceso a la escuela para todos y todas los niños y las niñas, terminando así con esta situación discriminatoria y arbitraria en la que solamente ciertos niños y niñas pueden ser inscritos. Pero mientras: ¿dónde están las medidas temporales recomendadas por el Protecteur du Citoyen?”, se pregunta Clarli Honegger del Colectivo Educación sin fronteras.
La Loi sur l’instruction publique de Québec no asegura el acceso universal a la educación gratuita sin discriminación – consignado en los instrumentos de protección de los derechos humanos como la Declaración Universal de los Derechos Humanos (artículo 26), el pacto internacional relativo a los derechos económicos, sociales y culturales (art. 13) y la Convención relativa a los derechos del niño (artículo 28), a la que Québec se declaró obligado por la adopción del decreto 1676-91 del 9 de diciembre de 1991.
Según las estimaciones del Ministerio de Educación, hay cientos de niños y niñas en Québec que son excluidos y excluidas de las escuelas debido a su propia condición migratoria o a la de sus padres. De acuerdo al informe del Protecteur du citoyen del Québec, la cifra podría llegar a «varios miles».