El telepredicador integrista suní turco Ahmet Mahmut Ünlü, popularmente conocido como ‘Cübbeli’, afirmó que los jugadores de ajedrez “son malditos” y que la mayoría “son mentirosos” así como las reglas del juego. La noticia la ha hecho pública el diario turco Hurriyet en su edición del lunes 2 de enero de 2017.
Ünlü sostuvo que el ajedrez “es más pecador” que los llamados juegos de azar. “Jugar al ajedrez es peor que comer carne de cerdo y los juegos de azar. Las personas que juegan al ajedrez son más propensos a la mentira que otros y no pueden decir la shadada –profesión de fe islámica- mientras se están muriendo”.
“Las personas que juegan al ajedrez están malditos, maldecidos, se debe rezar en vez de jugar a juegos como éste” sentenció finalmente este imán que cuenta con cierta influencia en el país.
La Federación de Ajedrez de Turquía (TCF), que preside una mujer, Gülkız Tulay, ya ha respondido anunciando acciones legales al respecto y calificando de “inaceptables” estas declaraciones y señalando que el ajedrez es uno de los juegos más populares en el país, recordando que están federados 700 000 personas, esperando alcanzar el millón. También citan que defiende valores como la hermandad y la tolerancia y que seguirán difundiendo la belleza de este deporte que aboga por la unidad y solidaridad.
Llama la atención el país donde se ha producido, Turquía, que alberga el mayor Museo del mundo del Ajedrez ubicado en Ankara y cuya federación ha sacado una iniciativa como ‘Ajedrez a través de las calles’.
También el ministro turco para la Unión Europea, Omar Çelic, ha criticado las declaraciones señalando que él mismo juega al ajedrez y aconseja a todos hacerlo. “El ajedrez significa la alegría de la sabiduría, es un valor en la cultura oriental”.
Estas declaraciones del telepredicador turco recuerdan a las efectuadas hace casi un año por el gran muftí, Abdul Aziz bin Abdullah al ash-Sheikh, máximo juez de los wahabíes, visión rigorista del Islam que existe en Arabia Saudí, quien prohibió la práctica del ajedrez en una fetua (pronunciamiento legal en el Islam), con el pretexto de que es una pérdida de tiempo y dinero: “Es la obra de Satanás”, dijo.
No hay que olvidar que los integristas musulmanes le acusan de ser el más reprobable de los juegos, incluso que los de azar, “por ejercer una mayor fascinación sobre el creyente”.
Actualmente el Dáesh (Isis según las siglas en inglés) en el territorio que controlan en su llamado califato del Levante e Irak lo tiene estrictamente prohibido, es haram, jugar al ajedrez.
Ante esto habría que recordar esa conocida frase del ajedrecista y campeón del mundo Mijail Tal (1936-1992): “Si prohibiesen el ajedrez, probablemente me haría contrabandista”.