Lenín Moreno asume hoy, 24 de mayo de 2017, la presidencia de Ecuador, con el comprimo de ser “el presidente de todos” pero “fundamentalmente de los pobres”, tras alcanzar el 51,16 % de los votos en la segunda vuelta de las elecciones celebradas el pasado 2 de abril, informa Andes.
Lenín Boltaire Moreno Garcés, oriundo de la provincia amazónica de Orellana, es licenciado en Administración Pública por la Universidad Central del Ecuador. Está casado con Rocío González desde hace 40 años, con quien ha tenido tres hijas.
“A ustedes me debo y nunca traicionaré” es una de las frases con las que se ha dirigido al pueblo ecuatoriano desde que fue electo en las urnas, junto con el vicepresidente reelecto para este puesto, Jorge Glas, con quien ha prometido continuar el camino trazado por su antecesor, Rafael Correa, en la denominada Revolución Ciudadana.
El nuevo presidente de los ecuatorianos ocupó la Vicepresidencia del país entre 2007 y 2013, desde la que reivindicó los derechos de las personas con discapacidad a través de los programas Misión Solidaria Manuela Espejo y Joaquín Gallegos Lara por los cuales ha sido reconocido internacionalmente hasta ser nominado, en 2012, para Premio Nobel de la Paz.
Su gestión le valió también para ser nombrado Enviado Especial de la ONU sobre Accesibilidad y Discapacidad, puesto que desempeñó desde diciembre de 2013 hasta su postulación como candidato a la Presidencia de Ecuador en diciembre de 2016.
Este hombre carismático para ese grupo minoritario de la sociedad, recibió en 1998 un disparo a quemarropa que dañó su médula espinal y lo dejó sin movilidad en ambas piernas. Desde entonces hizo del humor su forma de valorar la vida, se transformó en motivador profesional a través de conferencias y escribió alrededor de diez libros sobre su teoría del humor.
“Descubrí que la risa tiene la misma vía nerviosa que el dolor, es decir, cuando ella está el dolor no puede estar”, dijo en declaraciones pasadas el ahora jefe de Estado.
A sus 65 años de edad, asume el liderazgo de un país con más de 16 millones de habitantes y que en los últimos diez años ha experimentado el período más estable de la historia reciente ecuatoriana, una etapa de cambio y progreso que elevó los índices de desarrollo; algo que ha sido reconocido nacional e internacionalmente.
El nuevo binomio presidencial llega con el compromiso de continuar y profundizar el trabajo a favor de los sectores más pobres del país.
Diálogo, empleo y desarrollo productivo, acceso a la educación superior, creación de un plan de vivienda de interés social para la población en situación de riesgo o vulnerabilidad, lucha frontal contra la violencia y el narcotráfico; vejez digna para los adultos mayores; atención a las madres embarazadas y al niño desde la gestación; y la revolución del agro, son los ejes del plan de su gobierno.
“Tenemos el reto de superar los logros alcanzados por el actual mandatario”, ofreció durante una campaña electoral que se caracterizó por su estilo conciliador, amable y abierto al diálogo. En la primera vuelta electoral, el candidato de Alianza PAIS, superó al aspirante de Creo-SUMA, el banquero Guillermo Lasso, por un millón de votos, una ventaja de 11,27 %.
Principales ejes de gestión
Consolidar el proyecto nacional tomando como base la participación ciudadana, fortalecer las capacidades productivas del país para superar la dependencia de los mercados e inversores extranjeros y de los recursos naturales nacionales; mantener y ampliar las políticas de protección social; impulsar el trabajo digno, elaborar nuevas leyes para asegurar la sostenibilidad del Sistema de Salud y la Seguridad Social; y la equidad tributaria, para que paguen más impuestos los que más tienen, son la base de su propuesta de gobierno.
El programa que más acogida ha tenido es “Casa para todos”, al cual se han registrado un millón y medio de personas. La idea es promover la construcción de viviendas para suplir el déficit que tiene el país en ese rubro y dinamizar la economía con la creación de 136 mil empleos en esa área.
Con respecto a la educación, la propuesta de Moreno es mantener el concepto de universalidad y gratuidad para todos en todas las instancias educativas, y la construcción de 40 universidades técnicas.
El proyecto ‘Toda una vida’ para acompañar a los ciudadanos desde el momento de la concepción hasta que cierren sus ojos a la vida, y dentro de este al programa ‘Ternura’ para los cuidados de las madres y los niños, el parto institucionalizado, el tamizaje neonatal, la estimulación temprana y la alimentación para erradicar la desnutrición infantil.
Además, plantea el incremento del Bono de Desarrollo Humano de 50 a 150 dólares y de una pensión para las personas de la tercera edad, con seguro social gratis y un sepelio digno.
Ofreció apoyo a los emprendimientos con 15 000 dólares al 2 % de intereses, con dos años de gracia y a 15 años de plazo. También trabajará contra el narcotráfico y el microtráfico y reforzará la enseñanza de valores a los hijos en el amor a la Patria, identidad y lealtad.