Una lección de vida y de libertad sobre un tema tabú
Proyectada en sesión especial en la selección oficial del pasado festival de San Sebastián, y tras el aplauso unánime del público en varios otros festivales, de Nantes a Estambul, llega a las pantallas de Francia “Vivir y otras ficciones” del cineasta catalán Jo Sol, una obra fuerte y poética, una ficción bien documentada, que aborda el tema siempre tabú de la anomalía y de la sexualidad de un joven tetrapléjico.
Un brillante ejemplo de producción independiente, de Shaktimeta Produccions, en el marco del actual cine español, que no ha contado con el apoyo de ninguna institución oficial, ni de los canales de televisión, y fue producida mediante crowdfunding, con Luis Miñarro, como productor asociado.
Cine urgente y necesario el de esta ficción cuyo contenido documental viene dado por el propio protagonista: Antonio Centeno, (coguionista del documental “Yes we fuck” 2015) escritor tetrapléjico, que no es actor profesional y milita abiertamente contra la hipocresía social y reivindica el derecho de las personas discapacitadas físicamente a vivir plenamente su sexualidad.
El guion cinematográfico se estructura a través del encuentro de dos personajes anómalos: el propio Antonio y Pepe, una de las personas que se ocupan de él, (el actor Pepe Rovira interprete de “El taxista ful”, película anterior de Jo Sol, premio especial del jurado en San Sebastián 2005) un hombre salido de un siquiátrico, tras haber robado taxis para ganarse la vida. Un personaje que Jo Sol recupera en esta nueva trama para enfrentarlo con sus propios problemas a la discapacidad de ese tetrapléjico libertario y vitalista.
La “normalidad” en esta ficción alimentada de la realidad documental, está representada por el personaje de la joven que también se ocupa de Antonio, y que al igual que Pepe, no comprende y no acepta la decisión del joven tetrapléjico de convertir su casa en un lugar de citas para facilitar la asistencia sexual a los minusválidos, con la ayuda de “una trabajadora sexual”.
Rompiendo con el tabú que rodea la vida de los minusválidos o discapacitados, que nuestra sociedad prefiere esconder e ignorar, Jo Sol reivindica su derecho a vivir plenamente como cualquier persona “normal”, y pone en cuestión precisamente la hipocresía de esa “normalidad” que sustenta nuestra sociedad de consumo. Para que como lo dice su protagonista, “una persona discapacitada no sea simplemente como un cocodrilo en un zoológico”.
Con escenas crudas de limpieza intima del cuerpo, con secuencias de asistencia sexual, o con los fantasmas eróticos del propio Antonio, y excelentes diálogos, Jo Sol interpela al espectador poco acostumbrado a ver la realidad tal como es, a través de esos cuerpos mutilados o deformes, como eco de nuestra propia fragilidad. Sin compasión, ni acentos melodramáticos asistimos así a una estupenda crónica social que es un grito libertario a favor de la vida y de la libertad individual y colectiva.
La magnifica música de cante y guitarra flamenca de “El niño de Elche”, acompaña con su poesía y mediante un ajustado montaje, el devenir de Pepe, que por su parte intenta salir de su propia “anormalidad” a través de la música.
Como lo explica Jo Sol, esta es una obra muy diferente de sus películas anteriores. “Pepe Rovira estaba ya en el centro del taxista ful que hice hace doce años, sobre el tema de la precariedad laboral. He querido reutilizar ese personaje al escribir este nuevo guion, que está inspirado en otra de mis películas Fake Orgasm, en 2010, sobre la transexualidad y la identidad. Cuando Antonio Centeno conocido activista tetrapléjico supo que tenia este proyecto sobre la sexualidad de los discapacitados, se puso en contacto conmigo y leyó el guion como nadie antes lo había hecho”.
“El cuerpo –añade Jo Sol- se ha convertido en un lugar hacia el que convergen diversos movimientos contemporáneos, donde el movimiento Crip se mezcla con el movimiento Queer, en una reflexión sobre la identidad, que va mas allá del espíritu hegemónico y que hace vacilar al sistema poniéndolo en tela de juicio. Es de este punto de vista que nació la película”.
En su estreno en Francia los cines de Arte y Ensayo proponen así mismo una versión de la película con subtítulos para sordos o con discapacidad auditiva. La APPAS, Asociación para la promoción del acompañamiento sexual, que se propone acompañar la vida afectiva, la sensualidad o la sexualidad de personas discapacitadas, ha patrocinado en Francia el estreno de esta excelente película, que les recomendamos absolutamente.