El periodismo es una profesión de alto riesgo en México, país que tiene además una libertad limitada debido a la corrupción y a la violencia del crimen organizado, que lo convierten en una democracia incompleta.
México se encontraba en el lugar 66 junto con Serbia en la lista 2017 de democracias de la revista The economist y obtenía el siguiente baremo sobre 10: 7.83 en procesos electorales, 6.43 en funcionalidad gubernamental, 7.22 en participación política, 4.83 en cultura política y 6.18 en libertades civiles.
En cuanto a los países más violentos en América Latina, se encuentran también Brasil, Honduras y Colombia.
Los regímenes autoritarios son el principal factor que impide la libertad de prensa, sin embargo, en el caso de México el factor más influyente es el crimen organizado que se ha ensañado con los periodistas que cubren temas de narcotráfico y corrupción.
Periodistas asesinados en México
En lo que va de año 2018 ya son cuatro los periodistas asesinados:
- Pamika Montenegro, comunicadora y bloguera que usaba el seudónimo ’La Nana Pelucas’, fue acribillada a tiros a principios de febrero, frente a un restaurant(e) del puerto de la ciudad de Acapulco, en el estado de Guerrero, en el sur de México.
- Agustín Silva Vásquez, de 22 años, 21 de enero del 2018 reportero policial freelance de El Sol del Istmo, desapareció en Matías Romero, Oaxaca, según denunciaron sus familiares ocho días después del secuestro, de acuerdo con un reporte de Fapermex – Felap México.
- Carlos Domínguez Rodríguez, periodista de El Diario de Nuevo Laredo de 77 años, en la ciudad homónima del estado Tamaulipas, fue asesinado de 21 puñaladas el 13 de enero.
- José Gerardo Martínez Arriaga, de 35 años, editor de la agencia de noticias del diario El Universal, fue asesinado el día de reyes con disparos en el abdomen mientras el periodista se dirigía a comprar juguetes en Coyoacán, Ciudad de México, informó la versión digital del periódico, citando a la secretaria de la Seguridad Pública del país.
Con estos nombres ya son cuarenta los periodistas asesinados durante la administración de Enrique Peña Nieto, que en 2017 cerró con doce homicidios de periodistas, una de las cifras más altas de los últimos tiempos.