Todo esta listo en la ciudad balnearia de Cannes, en el sur de Francia, para que arranque esta noche la maquinaria del Festival Internacional del Film. Esta ciudad muy turística que acoge en tiempo normal 74.000 personas, verá circular en sus calles un total de 200.000 visitantes durante doce días. El ministro del interior ha anunciado draconianas medidas de seguridad, tanto en el aeropuerto de Niza, como en la ciudad de Cannes y sobre todo en las inmediaciones del palacio de festivales, cuyas entradas estarán vigiladas por 500 agentes de seguridad.
Palma de Oro de honor para Jean Pierre Leaud
Después de la cineasta Agnes Varda en 2015, es ahora el actor francés Jean Pierre Leaud quien será galardonado en esta 69 edición con la Palma de Oro de honor por el conjunto de su carrera. La primera Palma del festival acaba pues de ser anunciada por los organizadores, mientras que la Quincena de realizadores ofrecerá este año su premio de honor Carroza de oro al director finlandés Aki Kaurismaki.
Un premio emblemático la Palma de honor, con el que Cannes ha galardonado en el pasado a personalidades del mundo del cine como Clint Eastwood, Manuel de Oliveira, Bernardo Bertolucci o Woody Allen.
Alter ego de Francois Truffaut en la pantalla, Jean Pierre Leaud empezó su carrera a los 14 años en “Los cuatrocientos golpes”, en 1954. Su personaje de Antoine Doinel acompañó a Truffaut en películas como “Antoine et Colette” 1962, “Baisers volés” 1968, “Domicile conyugal” 1970, o “L’amour en fuite” 1979.
También Jean Luc Godard solicitó el talento de Jean Pierre Leaud en películas como “Masculin, feminin” 1966, o “La chinoise” 1969, convirtiendo a Jean Pierre Leaud en una figura emblemática de la nouvelle vague del cine francés.
En la década de los setenta, trabajó con cineastas como el italiano Bernardo Bertolucci en “El último tanto en París” 1972, o los franceses Jacques Rivette en “Out 1” 1971, y Jean Eustache en “La maman et la putain” 1973, gran premio especial del jurado en Cannes que será la consagración del actor.
Años después su personalidad enigmática y marginal sigue fascinando a buen numero de cineastas en el mundo entero que le hacen participar en sus películas. Entre ellos Aki Kaurismaki, Olivier Assayas, Philippe Garrel o Tsai Ming Liang.
En esta 69 edición el veterano Jean Pierre Leaud, a sus 71 años de edad, será también en Cannes el protagonista de “La muerte de Luis XIV” del cineasta catalán Albert Serra, presentada fuera de concurso en sesión especial, en la selección oficial. En 2006 Serra se dio a conocer en Cannes con su película “Honor de cavalería” y dos años después volvió a la Quincena de Cannes con “El cant dels ocells”.
Woody Allen alza el telón con una comedia
Woody Allen, quien un día en forma de broma afirmó que solo asistiría a una competición en un festival si todos los directores hacían su película sobre el mismo tema, se ha especializado en venir a Cannes fuera de concurso, seguro siempre de su éxito internacional. Su posición es sin duda coherente, aun si un festival de cine no tuviera el mismo atractivo sin ese morbo tan absurdo que es comparar películas diametralmente opuestas y con muy dispares presupuestos de producción.
Esta es la tercera vez que una de sus películas abre el festival de Cannes, y ha sido seleccionado en total catorce veces, pero siempre fuera de concurso. “Yo sería un mal perdedor” afirma con sorna Woody Allen, quien mantiene así con el festival una relación muy ambigua y particular, pues le encanta acudir al festival, pero prefiere renunciar a la esquizofrenia de la competición.
A sus ochenta años de edad, el bulímico Woody Allen presenta ahora en Cannes su ultima película: Café Society, una comedia ambientada en los años treinta entre Hollywood y Nueva York, en la que un joven neoyorquino busca hacer carrera en el mundo del cine… Su protagonista es el poco conocido actor norteamericano Jesse Eisenberg, acompañado por Kristen Stewart, Steve Carell y Blake Livelli, en su reparto.
Explicando la ausencia de estrellas más célebres en su película, Woody Allen ha declarado que “los actores famosos a menudo están pillados en otras películas, o piden demasiado dinero”, “pero hay muy buenos actores en los Estados Unidos para poder hacer un casting” afirmó el octogenario cineasta neoyorquino.