La Unión General de Trabajadores (UGT), uno de los dos sindicatos mayoritarios en España junto a Comisiones Obreras, aporta la cifra de un millón 300 mil desempleados entre profesionales cualificados, el 22 por ciento del total de parados en este país europeo, que en agosto se ubicó en casi cuatro millones 700 mil personas, informa PL.
En un informe difundido este domingo, la UGT revela, además, que dos millones y medio de ocupados están subempleados, es decir, trabajan en puestos de trabajo que requieren menos cualificación de la que poseen o lo hacen menos horas y ganan poco.
El sindicato considera que la reforma laboral del Gobierno abarata y facilita el despido, impulsa la precariedad y temporalidad de las condiciones laborales y es un instrumento útil para quienes optan por competir únicamente en base al abaratamiento de los costes laborales.
A juicio de la central obrera, se está caminando hacia un mercado de trabajo de supervivencia, en el cual muchos empresarios utilizan la crisis y los cambios impuestos por el Ejecutivo para rebajar las condiciones laborales y salariales de los trabajadores.
«Algunos comportamientos rayan incluso la rapiña laboral al aprovecharse de la necesidad de los españoles de encontrar un trabajo», remarca UGT.
Según este sindicato, las modificaciones introducidas por la administración conservadora de Mariano Rajoy son un instrumento muy útil para los que optan de manera errónea por competir en base únicamente al abaratamiento de los costes laborales.
Sobre esto último recuerda que en el segundo trimestre de 2013, de acuerdo con datos oficiales, los costes laborales cayeron 2,3 por ciento, en contraposición con los beneficios de las empresas, que crecieron tres por ciento.
La UGT estima que los problemas de España responden a una dejación de los poderes públicos, a la aplicación de políticas económicas desacertadas y contraproducentes y a la ausencia de una visión estratégica para propiciar un cambio del modelo productivo.
El sindicato emplaza al Gobierno a apostar por la protección frente al desempleo, pues en la actualidad casi cuatro de cada 10 parados registrados en las oficinas de empleo carecen de prestaciones, lo cual eleva los niveles de pobreza y exclusión social.