El presidente ecuatoriano Lenin Moreno no parece dispuesto a seguir manteniendo a Julian Assange, el fundador de Wikileaks, refugiado en su embajada de Londres, donde lleva seis años y su vigilancia «ha alcanzado sumas astronómicas”, según la información de Guillaume Petit en Euronews.
Muy diplomáticamente, en una entrevista, el presidente Moreno ha dicho que a él no le gusta que Assange siga recluido –porque “en el marco del respeto de los derechos fundamentales, seis años es demasiado tiempo para que una persona permanezca prácticamente encarcelada en una embajada”- y que es libre de abandonar su refugio si lo desea.
Al parecer, Julian Assange, australiano de 47 años que ha adquirido la nacionalidad ecuatoriana durante su encierro, no quiere dejar la embajada por temor a que le detenga la policía británica y le extradite a Estados Unidos, donde esperan juzgarle algún día por la publicación en Wikileaks de miles de documentos diplomáticos y secretos militares estadounidenses en 2010.
Si bien las denuncias que pesaban contra Assange en Suecia, por violación de dos mujeres, fueron sobreseídas en mayo de 2017, la justicia británica sigue manteniendo una orden de detención por quebranto de las condiciones de libertad con fianza en 2012.
En un artículo publicado en el número de diciembre de Le Monde diplomatique, firmado por su director Serge Halimi, se recuerda que en la última década Wikileaks ha publicado casi todas las revelaciones que han disgustado a los poderosos del mundo: desde imágenes de los crímenes de guerra cometidos por los soldados estadounidenses en Afganistán e Irak, hasta el espionaje industrial en Estados Unidos; desde un comunicado del Departamento de Estado calificando de “régimen esclerótico” y “casi mafia” la dictadura de Zine El-Abidine Ben Alí en Túnez hasta los correos pirateados de la campaña de Hillary Clinton “estimando que este asunto favoreció los designios rusos y la elección de Trump”.
En su artículo, Halimi acusa a los periodistas que se han desentendido de la suerte de Assange “y se deleitan con su infortunio”, y entre ellos menciona a Christopher Matthews, presentador-estrella del canal MSNBC, “excacique del Partido Demócrata”, quien ha sugerido “que los servicios secretos estadounidenses deberían “actuar a la manera israelí y secuestrar a Assange”…
Que verguenza para Ecuador. El presidente se vendio a EEUU y lamentablemente es muy obvio. El venderse tiene un nombre y empieza con P y termina con O. Hoy en dia esa misma palabra parece ser sinonoma con la palabra presidente.