Así andamos un año más en esta España nuestra en donde vemos que lo más comentado son las ligerezas de la doña, llamada Pedroche, de nombre de pila Cristina. Una vallecana con más o menos salero, ordinaria en sus modales y de lengua viperina pero es lo que le pone al personal.
No sabemos si es que la vulgaridad vuelve a ser el leit motiv de los españoles o si la elegancia versus la horterada es la competencia desleal con la que comenzamos el año quince de esta era. Menos mal que el 45.6 por ciento de los españoles se decantó por lo clásico, por el buen hacer del hombre de la capa y la mujer de rojo, que al menos, sostuvieron la elegancia una vez relatados los cuartos.
Nos despertamos con novedades nada más comernos las doce uvas y sucede, porque está sucediendo, que lo que sabíamos que existía se pone en marcha; y vaya marcha que han tomado las medidas de Mariano. Tras sus paseos bajo el agua de su tierra natal, se dispone a comenzar un año de lucha por la silla y si tiene que ser de la mano de Pedrito el fantástico, lo hará. Amanecemos con una noticia que nos devuelve por un segundo al 11 M y una mochila hace que Madrid se detenga nada más empezar el año; falsa alarma, no pasa nada, o nada que nos deba alarmar.
La Duquesa de Palma, alías la hermanísima del monarca o la cuñada de la reina, se ve envuelta de nuevo en un sinvivir y ahora apela, aunque ya sabe que sentada, será juzgada como una choriza más del reino. Ahora vale todo, hasta que una infanta de España robe. Es triste pero ya sabemos las fechas y en este último año de libertad para un Urdangarín que poco a poco se consume, acaso sabremos que alguno más además de su socio, se comerán las uvas del 15 entre rejas como lo hiciera la Pantoja que a estas alturas, ya es una presa más y ha entonado con gracejo aquello de «¡a tu puerta hemos llegado, cuatrocientos en cuadrilla, si quieres que nos sentemos, saca, cuatrocientas sillas!»…
463 horas de pleno han dado lugar a 50 leyes que pondrá el Ejecutivo en marcha a marchas forzadas porque las que quedan darán lugar a que en las siguientes elecciones esté todo el pescado vendido. La única baza que le queda al gallego es poner a su Esperanza, que es lo único que le queda, en la alcaldía de Madrid, mientras la Botella se va a una academia a ver si consigue averiguar, cómo se conjuga el verbo to be.
Así andamos en los comienzos de este año que promete ser divertido como lo ha sido el 14 en cuanto a información se refiere. Comenzamos con la premiere de 50 Sombras de Grey que al parecer ya ha vendido sus 15000 primeras entradas. Maestro de amantes y andantes, hace que la fogosidad del tal Christian atraviese la pantalla y de a las doñas algo que quieren, desean y procuran; quizá tener un amante como él, o tal vez, sean ellas las que guiadas por las dotes de semejante especie, consigan averiguar cómo incitar a su marido para que comience el año dando saltos de alegría siendo ellas por un instante como la tal Steele; ahora dígame que no se lo ha leído, que se lo ha comentado una vecina, y que usted, solamente lee a Góngora.
No sé, lo que sucede es lo que es. Nos interesa eso, la pechotes, la ordinariez de Adán y Eva, el hashtag de #yoveoSalvame además de la fornicación en Si bemol del tal Christian, y esas mandangas amén de las transparencias de la Pedroche que no dejan títere con cabeza y hacen reflejar en los medios, una vez más, qué quiere España llegados el año 15 de este siglo llamado XXI.
Mientras nos tienen entretenidos con calentones de jesmar y tetas a babor, Podemos triunfa en Euskadi y en el país de Mas que está a estas alturas contando la lotería que le ha tocado. ¿Eh? es la única palabra que entiende todo el mundo según la RAE. Ese gruñido, extrañeza, y esa cara de decir, pero ¿esto qué es lo que es? nos hace ser uno en materia del todo vale y no me la cuelas. Vuelve la primavera en invierno y traerá a los Reyes Magos en helicóptero; no estamos para recoger mierdas de camellos… ya con las de la tele tenemos suficiente.
Me voy a ver la Cenicienta que al menos, tiene un príncipe, hay ilusión y me hará soñar que cualquier mundo de ficción es necesariamente mejor. Contribuyentes y empresas pagaremos menos impuestos hoy… Luego viene la letra pequeña porque subirá la luz, el butano, el tren, correos, etc, etc…
Feliz Año queridos lectores. Cualquier tiempo pasado dicen que fue necesariamente mejor, pero esperemos que el 15 nos de salud. Lo demás, siempre se puede cambiar, llegado el caso.
¡Vamos, que nos vamos!