No sabemos si lo nuestro es el ombligo de mundo o algo parecido, lo que si es cierto es que la mayoría de los españoles creo que no deben leer la prensa. Cuando el maravilloso calor que todos esperaban llega sin remedio y todos los planes de los españoles se enmarcan en unos días tirados a la bartola, el mundo se resquebraja sin remedio a la espera de que los que mandan digan, sigan o paren.
Es una contradicción como todas las que tenemos en nuestras vidas. Por un lado estar planeando días de relax cuando sabemos que sigue habiendo cinco millones de españoles que viven con sus padres, sin trabajo y sin esperanza y leer cómo se matan personas a pocos kilómetros de aquí. En España se procura con titulares, decir que nos estamos recuperando y que cada vez ahorramos más, pero mantengo que la contradicción como siempre está ahí. No hay más que ver cómo no se mueven las cifras y cómo cierran establecimientos porque el consumo baja y no hay cash; al meos el que había. El otro día escuchaba un monólogo que decía que el español mientras tenga para su caña y su partido de fútbol lo demás tiene poco sentido porque le importa un bledo.
Los glamourosos reyes siguen haciendo el periplo por los países cercanos y dan un aire fresco a la monarquía española y ya han dejado de criticar y envidiar a la Reina Letizia que por fin, hace lo que tiene que hacer y no es juzgada; eso también es un deporte nacional. Ahora se hace «selfies» en el cine y resulta que es estupenda; ya lo era, pero no la dejaban demostrarlo al parecer. Ya se encargan los que todo lo ven mal de echar palas de tierra sobre Felipe VI a quien ahora dicen vincular a Urdangarín; el hombre que tumbó la monarquía y puso las patas por alto porque al parecer, metió la mano en donde no era. El caso es practicar el deporte nacional; la envidia y la crítica antes que el fútbol.
En Gaza hay muerte y horror. Ese magnicidio al que asistimos con grabaciones, relatos y fotos ya no nos es extraño. Da igual el número de muertos porque hablamos de muerte y ahí eso, es moneda de cambio. 582 palestinos muertos y 29 israelies es la cifra con la que cerramos hoy, catorce días después del conflicto abierto. Obama promete 47 millones de dólares para reconstruir Gaza si se alcanza un alto el fuego mientras Hamas insiste en que no aceptará esa ayuda si no termina el injusto bloqueo a Gaza. La ONU también pide una tregua pero lo cierto es que no sucede. Hamas negocia con Turquía, Qatar y con Saeb Erekat mientras Egipto discute con Estados Unidos y otros países europeos. Lo cierto, lo verdaderamente cierto es que la masacre sucede mientras el mundo se cuestiona otras chorradas como dónde irse de vacaciones, por ejemplo.
En el otro lado del mundo, Putin promete también propiciar una solución negociada en Ucrania y lamenta profundamente la tragedia del vuelo MH71. Más horror, más muerte, más desolación. La muerte de este bebé está en tu conciencia, maldito seas Putín, palabras pronunciadas por Gerashchenko asesor del gobierno ucraniano.
Aquí nuestras chorradas se enmarcan en los líos de faldas del ex de la hija de la Pantoja, la boda número no sé cuántos de Francisco Rivera; va más de boda que de feria, y otras idioteces de la caja tonta. James está sanísimo y ya puede lucir la camiseta blanca así que otro pastizal encima de la mesa; ahí tampoco hay problema mientras Florentino se va de paseo con la #ViceSoraya a ver si construyen el metro en Lima que andan escasos de líneas… El dinero corre y todos viven en un glamour que ya no es vacacional, es anual, y eso, no les afecta. No sé si alguno se plantea esto llegados los últimos días de julio que parecen azotarnos con cuarenta grados; esos que pedían los que quieren calor para lucir palmito en las piscinas. Rosell, expresidente del Barcelona llega para declarar como imputado por el caso Neymar; uno más, o uno menos, según se mire. Y que sigan los imputados declarando. Eso ya no es un modus operandi en España, es un modus vivendi y como siempre, todavía no sabemos si pasa algo o no. El mismo tejemaneje que mantiene la audiencia entre Pablemos como le llaman ahora y Esperanza Aguirre. Repita conmigo, “los etarras son unos asesinos”, repita usted, “la trama Gürtel firmó contratos mientras yo era presidenta”. Y así, vamos pasando el verano.
Hollande se va a casar con Julie Gayet. A lo mejor se lo ha contado al Rey Felipe VI y vamos de boda este verano. Unas palabras para Alex Angulo; el hombre que supo hacer reír, hacer llorar y ser actor. No muchos pueden decirlo. Personas como él han hecho, que en días como hoy sigamos diciendo, ¡cuidado con la carretera! En un segundo cambia la vida, te matas y se acabó.
Y vamos si cambia.