Una segunda opción estaría en Bélgica
En torno a la localidad francesa de Perpignan, a 30 kilómetros de la frontera española, una villa de 400 metros cuadrados y varios apartamento más están preparados por si hubiera que acoger allí al gobierno catalán en el exilio, según ha publicado en la noche del 23 de octubre de 2017 la versión digital del diario francés L’Obs.
Unitat Catalana y el Comité pour l’autodetermination de la Catalogne Nord, dos movimientos franceses simpatizantes de la causa independentista promotores de la iniciativa, han manifestado en un comunicado: “Tras las palabras de Mireia Boya, miembro de la CUP y diputada en el Parlamento catalán… el Comité por la Autodeterminción de Cataluña Norte y Unitat Catalana ofrecen hospitalidad a Carles Puigdemont y su familia. Robert Casanovas, presidente del Comité, pone a la entera disposición del President de la Generalitat su villa de Théza, a 10 kilómetros de Perpignan, para que pueda alojarse en ella todo el tiempo que quiera”.
Jaume Roure, presidente de Unitat Catalana, ha añadido que también están inmediatamente disponibles una treintena de apartamentos cerca de Perpignan, mayoritariamente en las localidades de Canet y Saint-Cyprien, y que “con esta propuesta queremos expresar nuestra solidaridad y demostrar que nos organizaremos en caso de que todo esto degenere. Hemos acogido a refugiados sirios, también podemos acoger a los catalanes”.
Después ha recordado que en 1936 el gobierno de la República española se refugió en Francia y que el país acogió en las décadas siguientes a miles de españoles que huyeron del régimen franquista.
“Estos militantes franceses no son los únicos que quieren acoger a los catalanes –finaliza la información de L’Obs firmada por Sarah Diffalah– El nacionalista flamenco y politólogo belga Bart Maddens, en una entrevista al diario Le Soir, considera que “Bélgica sería una opción evidente en caso de exilio porque es elpaís que ha mostrado mayor simpatía por el movimiento independentista en Cataluña”.