La jueza británica Vanessa Baraitser, quien el pasado lunes 4 de enero de 2020 rechazó la demanda de extradición a Estados Unidos de Julián Assange, fundador de Wikileaks, hoy, dos días más tarde, se ha negado a dejarle en libertad en espera de que se resuelva la apelación estadounidense a su decisión.
La jueza, que negó su extradición por motivos «de salud», alegando que existía la posibilidad de que pudiera suicidarse, ahora se niega a ponerle en libertad argumentando que podría huir: «Existen motivos serios para creer que si el señor Assange quedara hoy en libertad no acudiría al tribunal para enfrentarse al procedimiento del recurso». El gobierno mexicano se ha ofrecido para dar asilo político a Julian Assange.
Tras pasar siete años recluido en la Embajada de Ecuador en Londres, protegido por el presidente Rafael Correa, Julian Assange fue detenido por la policía británica en abril de 2019, tras la llegada a la presidencia de Ecuador de Lenín Moreno.
Assange, a quien apoyan numerosas organizaciones de defensa de los derechos humanos, y muy particularmente de la libertad de expresión e información, podría ser condenado a 175 años de cárcel en Estados Unidos por haber difundido, a partir de 2010, más de 700.000 documentos confidenciales de actividades diplomáticas y militares, entre ellos muchos relativos a las guerras de Afganistán e Irak.
Coincidiendo con la decisión judicial del pasado lunes, Wikileaks ha descargado todos sus archivos on line.
