«Los Amores Cobardes», opera prima de la gaditana Carmen Blanco, toma su nombre de una estrofa de la canción de Silvio Rodríguez “Oleo de mujer con sombrero” y está protagonizada por Blanca Parés (“El secreto de Puente Viejo”, “Amar es para siempre”) e Ignacio Montes (actor hasta ahora de series, entre otras “Los Serrano”). Hay que tener presente que la película se ha hecho con un presupuesto escaso y con aportaciones de amigos y familiares de la directora. No sé si es una buena idea.
Película intimista –que no responde exactamente al título- sobre las relaciones de amistad y la posibilidad, o no, de que puedan darse entre dos personas de distinto sexo, con una historia mínima, yo diría que escasa, en la que faltan por decir muchas cosas. Aparte de que parece innecesario el cuestionamiento. No es obligatoriamente bueno, a menos que uno se llame Antonioni, optar por el silencio de los intérpretes y pretender decirlo todo con la mirada, por grandes que sean los ojos de quienes miran.
Eva, una joven dibujante, regresa a su pueblo, donde viven su madre y su amiga incondicional, para pasar las vacaciones. Aunque no lo tenía previsto, se encuentra también con Rubén, un chico que fue su mejor amigo hasta que un día desapareció sin explicaciones.
Esta Eva es una chica atormentada que no soporta las intenciones protectoras de su madre, que no cuenta todo a su mejor amiga y a la que tampoco interesa integrarse en su círculo. Es una chica callada, demasiado, y tanto silencio puede llegar a aburrir al espectador. Sobre todo, porque detrás no parece haber gran cosa. Su “contrario”, Rubén, es un chico de rosto simpático que comete el error de intentar introducir el amor en esa amistad que parecía haber conseguido atravesar el tiempo.