Después de que la fiscalía financiera de Francia abriera una investigación preliminar contra la multinacional estadounidense Apple, por “obsolescencia programada” y “engaño”, ha sido la autoridad encargada de la competencia en Italia (Autorità garante de la concorrenza e del mercato, AGCM, autoridad independiente, conocida también como « Antitrust ») la que ha abierto una investigación contra los gigantes de la electrónica Apple y Samsung por obsolescencia programada, el 18 de enero de 2018.
Ambas marcas son sospechosas de estar aplicando “una política general comercial dirigida a explotar las carencias de algunos componentes para reducir el tiempo de prestación de sus productos con el fin de incitar a los consumidores de comprar nuevas versiones”, explica la AGCM en un comunicado, donde también explica que ha realizado inspecciones en las dos sedes en Italia, con ayuda de la policía de finanzas.
Las dos investigaciones, que se desarrollan por separado, se han puesto en marcha tras recibir denuncias de consumidores.
Por lo que respecta a Francia, la fiscalía financiera abrió el pasado 5 de enero una investigación preliminar contra Apple por “obsolescencia programada “ y “engaño”, tras recibir una denuncia de la asociación Hop (Halte à l’obsolescence programmée). Hop estima que, a través de sus actualizaciones, Apple reduce la duración de sus aparatos para “provocar el cambio”. El 21 de diciembre de 2017, la firma reconoció que desde hace un tiempo reduce voluntariamente el rendimiento de sus iPhones, y argumentó que lo hace para “prolongar su vida”.
Según manifestaciones del director general de Apple, Tim Cook, efectuadas el 18 de enero al canal estadounidense ABC News, en las próximas semanas se pondrá a disposición de los usuarios de iPhones una actualización que les va a permitir verificar el estado de su batería, con lo que se pretende mejorar “la experiencia del cliente”. Cook aprovecho la entrevista para recordar que “las baterías envejecen con el tiempo”, y que las que se encuentran en mal estado corren el peligro de hacer “arranques intempestivos”. No solo en Francia e Italia, también hay investigaciones abiertas sobre las prácticas de Apple en Estados Unidos y Rusia, siempre como consecuencia de denuncias presentadas por usuarios.
En cuanto a Samsung, según Le Monde dos oenegés francesas han denunciado a la marca por “prácticas comerciales engañosas”, y acusan a la transnacional surcoreana de emplear a niños en sus fábricas e imponer condiciones de trabajo y alojamiento indignas a sus trabajadores en China.