Para responder a la pregunta que todos los inviernos se hacen muchos habitantes del planeta Tierra, acerca de cuál es el lugar más frío, la Agencia Espacial Estadounidense (NASA) llevó a a cabo un estudio de datos durante más de 30 años consecutivos y en 2013 facilitó la respuesta, escribe la periodista Nathalie Mayer en el digital Futura Science.
Resulta que el punto más frío de la superficie terrestre se encuentra cerca de la cresta de una montaña de hielo situada entre los montes Argus, que culmina a 4090 metros, y Fuji, que tiene una altura de 3810 metros. La zona, que se encuentra en el polo Sur y a más de mil kilómetros en el interior del continente, y se conoce con el nombre de Meseta del Este de la Antártica, ha alcanzado varias veces, en los treinta años tomados en cuenta, los -92º centígrados por la noche. El último record del lugar es del 10 de agosto de 2010, en pleno invierno antártico, con -93,2º, en una noche clara y en condiciones que, según la NASA, “permiten la formación de una capa de aire extremadamente helado en la superficie del hielo”.
Evidentemente, en esa zona no hay quien viva. Para encontrar los lugares habitados más fríos de la Tierra hay que trasladarse al noreste de Siberia (Rusia), a la ciudad de Oimekon, construida durante la Segunda Guerra mundial, que tiene 500 habitantes y donde la temperatura media en el mes de enero es de -51,5ºC; con la excepción del invierno de 1993, cuando los termómetros llegaron a descender hasta -71,2ºC.
Otro de los lugares que siguen en la escala del frío es la ciudad de Harbin, situada en el extremo noreste de China, que cuenta con un millón de habitantes y celebra un festival anual de esculturas de hielo. Allí, las temperaturas normales del mes de enero oscilan entre -22º y -24º C, con un record registrado de -42º C.
El anterior record del frío se remonta a 1983, y lo estableció la estación científica rusa de Vostok en -89,2ºC, que correspondían a un punto del este de la Antártida.