El fotoperiodista egipcio Mahmoud Abu Zeid, conocido como Shawkan, de 31 años, está a punto de salir finalmente de prisión tras cinco años y medio, según anunció el abogado Karim Abdelrady. Las autoridades egipcias lo han trasladado a la comisaría de Khalifa y de allí a la de Guiza, cerca de El Cairo, para iniciar los trámites para su liberación.
Su condena de cinco años fue cumplida el pasado septiembre de 2018 pero se ha prolongado seis meses más debido a una pena por el pago de las multas emitidas por el tribunal como costes penales.
En total se prevé que serán liberados 214 presos aunque su hermano Mohamed especificó que no se sabía la fecha exacta de su puesta en libertad ya que la Policía debe esperar el visto bueno de la Seguridad Nacional.
Reporteros Sin Fronteras, Amnistía Internacional y otras organizaciones de derechos humanos pidieron su liberación durante estos años. Shawkan está apadrinado por diferentes periodistas españoles.
Expertos en derechos humanos y el grupo de trabajo de detenciones arbitrarias de la ONU denunciaron: «Los periodistas y los trabajadores de los medios de comunicación que cubren las protestas no deben ser criminalizados por sus deberes profesionales y, desde luego, no deben enfrentar la pena de muerte”.
La última gestión en su favor fue del presidente francés, Enmanuel Macron, en una visita a El Cairo en la que planteó ante el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, su situación y la de otros presos, solicitando mejoras en el campo de los derechos humanos.
La sentencia se produjo después de más de dos años y medio de interminables sesiones judiciales. No obstante, Shawkan, una vez puesto en libertad, deberá presentarse todos los días en comisaría, y no podrá salir del país durante un periodo de cinco años. Además se vigilarán sus cuentas y propiedades, en lo que se considera una libertad vigilada.
Shawkan fue juzgado en una macrocausa contra 739 personas por las protestas masivas de 2013 en Egipto. Se le solicitaba la pena de muerte –se dictaron un total de 75- según la petición de la fiscalía, y al final fue condenado a cinco años, que ya ha sobrepasado.
Se enfrentaba a nueve cargos, además de la posible pena de muerte y cadena perpetua, por acusaciones que incluían “el asesinato, el intento de asesinato, la pertenencia a un grupo ilegalizado”, –en alusión a los Hermanos Musulmanes– así como “la participación en una manifestación ilegal y la posesión de armas”.
Mahmoud Abu Zeid fue detenido el 14 de agosto de 2013 mientras fotografiaba la matanza de la plaza de Rabaa al Adawiya, en la que se encontraban miles de seguidores del presidente Mohamed Mursi, derrocado previamente por los militares el 3 de julio de 2013.
El fotógrafo ha trabajado para el diario egipcio Akhbar el Youm, colaborando con las agencias Corbis y Demotix de Londres y sus fotografías habían aparecido en medios como The Sun, Time Magazine, Bild o Die Zeit.
Expulsión de un periodista del New York Times
Por otra parte, las autoridades egipcias detuvieron y expulsaron a un corresponsal del New York Times, David Kirkpatrick, de 49 años, tan pronto aterrizó en el aeropuerto de El Cairo.
Estuvo detenido más de siete horas sin acceso a agua ni comida siendo confiscado su teléfono móvil. Posteriormente fue enviado de vuelta a Londres en un avión de EgyptAir.
Kirkpatrick fue jefe de la oficina del diario entre 2011 y 2015 en El Cairo y el año pasado fue autor de un libro sobre la primavera árabe titulado ‘En las manos de soldados. Libertad y caos en Egipto’. El redactor jefe del diario, Michael Slackman, se mostró “muy afectado por lo ocurrido”.
Por su parte, el portavoz de la embajada estadounidense en El Cairo, Sam Werberg, mostró “su preocupación” por lo ocurrido y la negativa a dar explicaciones a la entrada del periodista al país.
Al menos 38 periodistas y blogueros egipcios se encuentran encarcelados en la actualidad por causas relacionadas con informaciones. Egipto ocupa el puesto 161 de los 180 países analizados en el informe anual 2018 de Reporteros sin Fronteras.