Convaleciente en Alemania desde que en agosto de 2020 sufrió un intento de envenenamiento, el opositor ruso Alexei Navalny, abogado, político y bloguero de 44 años, ha anunciado su regreso a Rusia para el próximo domingo, 17 de enero de 2021, a pesar de que podrían encarcelarle.
La justicia rusa aceptó este martes, 12 de enero, una denuncia pidiendo que se convierta en prisión incondicional una condena de cárcel que se encuentra en suspenso. Navalny ha asegurado que se trata de una maniobra para impedir su regreso al país llevada a cabo por el servicio penitenciario ruso (FSIN) y que hace referencia a una sentencia de 2014 en lo que se llamó «el caso Yves Rocher», cuando le condenaron, junto con su hermano, a tres años y medios de cárcel, con la sentencia en suspenso, por desvío de fondos de una filial rusa de la compañía de cosmética francesa.
A finales del pasado mes de diciembre, el Comité de Investigación ruso abrió una causa contra él por «fraude a gran escala», indicando que es sospechoso de haber empleado en gastos personales 356 millones de rublos (3,9 millones de euros) procedentes de donativos para su ONG Fondo de Lucha contra Corrupción (FBK).
En un vídeo publicado en su cuenta de Instagram, Navalny ha escrito: «He sobrevivido. Ahora Putin, quien dio la orden de asesinarme, dice a sus servidores que hagan de todo para que yo no regrese (…) Nunca me he planteado la cuestión de regresar, o no. Simplemente porque no me he ido. Me encontré en Alemania a donde llegué en una ‘caja’ de reanimación». Y añade que ha sacado un «billete low cost en la compañía regular Pobeda» («victoria» en ruso, según la redactora de Libération Veronika Dorman) para el 17 de enero.
Alexei Navalny, militante anticorrupción y aspirante a enfrentarse un día a Vladimir Putin por la presidencia de Rusia, lo que hasta ahora se le ha impedido, se sintió mal y cayó en coma en un avión, cuando regresaba a Moscú tras participar en un acto electoral en una localidad de Siberia. El avión efectuó un aterrizaje de emergencia en Omsk, donde Navalny permaneció hospitalizado dos días, antes de ser evacuado al Hospital de La Caridad, en Alemania.
En los primeros días de septiembre, tres laboratorios europeos certificaron que Navalny fue envenenado con un agente tóxico de tipo Novitchok, una substancia desarrollada en laboratorios militares rusos para ser empleada en la guerra química.
La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OIAC) confirmó el envenenamiento y la investigación efectuada por los medios de comunicación independientes europeos Bellingcat y The Insider señaló como responsable del envenenamiento –probablemente en un té que Navalny bebió en el hotel antes del viaje- a los servicios de inteligencia rusos, FSB (antigua KGB), que llevan años vigilando a Alexei Navalny y siguiéndole en todos sus desplazamientos.
De hecho, hace unos días el propio Navalny, haciéndose pasar por otra persona, hizo que uno de ellos cayera en una trampa telefónica y le confesara detalles del envenenamiento que sufrió.
[…] Fuente: El confidencial […]