En nuestro país se desperdician hasta 7,7 toneladas de comida al año, lo que supone más del 42 por ciento en los hogares, y se sitúa en el séptimo lugar de la Unión Europea que más alimentos desperdicia.
Coincidiendo con el Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos que se celebra hoy 29 de septiembre, la Asociación de Fabricantes y Distribuidores, AECOC, celebra el noveno punto de encuentro contra el desperdicio alimentario en el que participarán diferentes empresas del sector.
La jornada analiza cada año destacados casos de éxito impulsados desde el sector primario, la industria y la distribución alimentaria, mostrando los mejores exponentes nacionales e internacionales.
«El desperdicio alimentario no solo representa, para empresas y consumidores, un impacto económico. Es un problema medioambiental, un impacto social y humanitario y afecta directamente a la reputación e imagen del sector y de la sociedad», aseguran desde AECOC.
Una de las empresas que ha participado es Phenix, considerada como la que más soluciones ha aportado para actuar contra el desperdicio hasta el momento, quien, a primera hora de la mañana, ha impartido la ponencia Dando una segunda vida a los alimentos.
En la ponencia participó su nuevo country manager, Jean-Baptiste Boubault. Con alta conciencia de los problemas sociales, medioambientales y humanos del modelo de sociedad actual y el consumismo, Jean-Baptiste siempre ha buscado aportar su experiencia y conocimientos en proyectos que aporten un impacto positivo a la sociedad. Su pasión por la tecnología y su preocupación por los fines sociales y medioambientales le hizo llegar a Phenix, startup que actúa contra el desperdicio alimentario, con la misión de impulsar la compañía en España.
Queridos amigos creo que deberían revisar la nota porque la cifra que dan me parece equivocada. Siete mil setecientos kilos de desperdicio son nada. Algo esta mal en el cálculo o en la comunicación.