El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, quien el pasado martes expuso ante el mundo la evidencia de la negligencia en la reparación ambiental de la operación de Chevron-Texaco en el Ecuador, explicó que las piscinas de Aguarico 4, donde acudió para mostrar que al hundir la mano en el agua aparece petróleo, fueron operadas solamente por Texaco, informa Andes.
“Ya tratan de engañar, que ese pozo lo operó luego Petroecuador y confunden: una cosa es el pozo, donde se bombea, y otra son las piscinas, donde se enviaba la contaminación, el agua contaminada. Un pozo puede tener muchas piscinas, algunas, tal vez, las hizo Petroecuador, pero otras las hizo Texaco y después no se tocaron, y pueden preguntar con habitantes de la Amazonía, dijo Rafael Correa este sábado en su Enlace Ciudadano.
“Solamente operadas por Texaco, porque el argumento de estos señores es que fue Petroecuador el que posteriormente contaminó; solamente operadas por Texaco, no hay cómo ocultar esto, pregunten si alguien más operó esas piscinas y ustedes meten la mano y sale la mano sucia con el petróleo a flor de tierra”.
El pasado martes el mandatario socialista visitó el recinto La primavera, del cantón amazónico Shushufindi (norte), donde se calcula que Chevron Texaco regó 18.000 millones de barriles de agua con petróleo; lo que es 85 veces más que el derrame de British Petroleum en el Golfo de México y 18 veces más que el desastre de Exxon Valdez en las costas de Alaska.
“Fuimos al pozo Aguarico 4, cantón Shushufindi, donde ustedes van y a flor de tierra ven una especie de pantano, que es petróleo regado”
Esa contaminación, primero, se debió evitar y si se hizo, se debió remediar. Se produjo y no remediaron nunca y mintieron; no solo esto, hay un tubo por el cual las piscinas, cuando llegaban a su límite, se vaciaban y enviaban la contaminación al río y contaminaron los acuíferos, pantanos”.
“Yo metí la mano en una especie de pantano donde sale el agua con puro aceite y estos inmorales, delincuentes, con sus millones quieren pretender que esto no existe, existe señores y cualquiera de ustedes lo puede ir a probar y no podrán tapar la verdad”.
“Esta piscina, de hecho, la abandonó Texaco en 1986. Nadie más la ha tocado”.
“Si no tienen sanción judicial por sus millones, tendrán sanción moral, y ojalá tengan sanción económica de los ciudadanos conscientes del planeta, ¡a no comprar productos de estos criminales de Chevron, de estos delincuentes que devastaron nuestra Amazonía!”, sostuvo Correa.
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