La maestra Zamira Esther Bautista, de 44 años, quien colaboraba como periodista independiente en medios de comunicación mexicanos, fue asesinada el 20 de junio por un grupo que disparó contra ella cuando se dirigía al trabajo en el municipio de Ciudad Victoria (Tamaulipas).
Esta agresión se produce un día después de conocerse el homicidio del reportero Elpidio Ramos Zárate, en Oaxaca, en el sur de México. “Los violentos en México se imponen a través del asesinato, mientras que la impunidad de sus crímenes los protege”, sostiene el presidente de la Comisión de Libertad de Prensa de Información de la SIP, Claudio Paolillo, en un comunicado en el que se suma a la petición de la Red de Periodistas del Noreste de México para acabar con la impunidad, fortalecer los “inoperantes” mecanismos de protección y hacer “cumplir la ley” para castigar “a los responsables de la violencia”.
Bautista, además de ser educadora, había trabajado como reportera de la sección de sociales en los medios El Mercurio y La Verdad, de Ciudad Victoria, según la prensa local.
Los autores del homicidio dejaron una cartulina con un texto que vincula a la víctima supuestamente con integrantes de un grupo de delincuentes que actúa en Ciudad Victoria, informó el gobierno estatal.