El Caribe no puede darse el lujo de tomarse un tiempo para actuar contra el cambio climático. De hecho, se encuentra al borde de una catástrofe, alerta el científico jamaiquino Conrad Douglas.
El experto, quien ha publicado más de 350 informes sobre manejo ambiental y asuntos relacionados, subrayó que la región necesita «una acción urgente en todos los niveles».
Según una información de Desmond Brown (IPS) desde Charlestown (San Cristóbal y Nieves) el especialista alertó también que la presencia de dióxido de carbono en la atmósfera está llegando a un punto límite: «Hay 445 partes por millón (PMM) de dióxido de carbono, esto es apenas cinco PPM por debajo… del límite que fue proyectado como catastrófico para el mundo», dijo a IPS.
Dado que cada año se suman 2,5 PPM a la atmósfera, Douglas advirtió que dentro de dos años la Tierra alcanzará un punto decisivo, en el que eventos climáticos aun más catastróficos podrían azotar a la población mundial: «hemos llegado a una coyuntura en la que todo el planeta afronta una situación precaria», dijo el científico. «Nos dirigimos a un momento peligroso para la Tierra», alertó.
Consecuencias potencialmente irreversibles
2012 fue el más cálido de la historia reciente, con las temperaturas más altas desde que comenzaron a ser registradas en 1895.
«Aún recordamos al huracán Sandy… y la destrucción que causó en nuestra región y en la costa oriental de Estados Unidos», indicó Douglas, antes de puntualizar que muchas partes afectadas todavía no se han recuperado.
Otro científico especializado en clima, John Crowley, dijo que el ciclo del nitrógeno en el planeta se ha desequilibrado gravemente debido al uso excesivo de fertilizantes no orgánicos: «Eso, según especialistas, tiene consecuencias catastróficas y potencialmente irreversibles, que obligan a repensar los sistemas agrícolas, incluyendo el uso de fertilizantes», dijo a IPS.
Estos dos científicos participaron de una reunión de expertos sobre formulación de políticas ambientales, celebrada el 15 y el 16 de este mes en Charlestown, auspiciada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
«En 2011, cuando por primera vez analizamos estos temas, quedó claro que el conocimiento sobre el cambio climático en el Caribe es insuficiente», indicó Crowley, también representante de la Unesco.
En 2009, un grupo de artistas jamaiquinos lanzaron una campaña de educación nacional sobre cambio climático. Fue parte de un proyecto implementado por Panos Caribbean, organización regional que ayuda a periodistas a cubrir temas de desarrollo sostenible, y por el Comité Nacional de Educación sobre Ambiente.
Los artistas produjeron un paquete de información diseñado para educar al público jamaiquino, que incluyen un disco compacto de canciones sobre el recalentamiento planetario, con un tema principal titulado «Cambio climático» y que también tiene su video clip.
Un asunto mundial
«Creo que finalmente hemos despertado a la urgencia de la situación, y que finalmente hemos puesto a prueba y excedido la capacidad del planeta de absorber y asimilar los contaminantes que creamos y descargamos», dijo Douglas. «Lo que necesitamos ahora es nada menos que algo como un Proyecto Manhattan» pero para rescatar a la Tierra, sostuvo.
Marcus Natta, analista de proyectos del Ministerio de Desarrollo Sostenible de San Cristóbal y Nieves, dijo a IPS que la reunión había sido muy oportuna: «Lo importante de esta conferencia particular es que se concentró en la acción. Creo que a diferencia de muchas otras reuniones, si esta vez realmente podemos concretar a acción luego de la planificación, lograremos un gran éxito», señaló.
La pequeña isla de Nieves es considerada uno de los pocos paraísos de la Tierra que permanece intacto y una de las maravillas del Caribe. Douglas espera que las acciones acordadas en la reunión sirvan para preservarla así: «Esperamos que, en el contexto que afrontamos hoy, se puedan preservar su belleza y encanto por mucho tiempo mientras tomamos acciones sabias para proteger el hábitat de la humanidad y de todas las criaturas vivientes», dijo el científico a sus colegas.
«Tenemos que protegernos a nosotros mismos. Son nuestras actitudes, nuestros valores y nuestro fracaso en cambiar nuestro comportamiento que nos llevaron a este punto crítico», alertó.
Además señaló que la humanidad va por un camino que «amenaza con sumergirnos en un ciclo perpetuo de pobreza y miseria».