El tipo entretenimiento que elegimos en nuestro tiempo libre viene determinado la mayoría de las veces por las tendencias. Cuanto más fácil nos ponen hacer o adquirir algo, mayor probabilidad tendremos de elegirlo frente a otras opciones. Por eso, de una u otra manera, se ponen de moda ciertas actividades frente a otras.
El año que acabamos de cerrar nos ha mostrado, por ejemplo, que ir al cine sigue siendo una de las actividades favoritas de los españoles, a pesar de Netflix, HBO o Amazon Prime Video, a pesar de que la bajada del IVA en el cine no haya afectado al precio final para el consumidor. Una cartelera siempre apetecible hace que ir al cine, sea solo o acompañado, siempre sea un plan con buena acogida. Eso sí, las bebidas y aperitivos suelen venir desde casa en la mayoría de las ocasiones.
En cuanto al ocio deportivo, el boom de la bicicleta y el running parece haberse calmado un poco, lo que significa que no ha seguido aumentando pero se mantiene estable. Cada vez hay más personas que deciden hacer deporte pero el gimnasio no es la primera opción. En cuanto a consumirlo como espectáculo, es cada vez más importante en nuestro país, y se acompaña de los pronósticos deportivos más modernos, la quiniela deja paso a las apuestas online.
Los videojuegos ganan cada vez más terrenos en el amplio sentido de la palabra: desde edades preescolares hasta la tercera edad, el juego digital está presente en nuestra rutina. Los videojuegos en red que incluso tienen cabida como espectáculo a modo de eSports son los favoritos con Fortnite a la cabeza, pero también jugar a la ruleta es una tendencia al alza, y es que para ser un juego tan sencillo puede incluso aportar unos ingresos extra, siempre que se juegue con dinero real.
De cualquier manera, y en contra de lo que pueda parecer a simple vista, una de nuestras prioridades sigue siendo cultivar nuestra vida social presencial. Nos gusta salir, conocer gente, desvirtualizarla, sobre todo sentados con un café o una cerveza delante, y por qué no, una cena low cost. Y es que los Españoles están hechos para socializar. Una costumbre que esperamos no deje nunca de ser tendencia.