Amnistía Internacional informa de que este miércoles 23 de septiembre de 2015, los Jefes de Estado de la Unión Europea se vuelven a reunir para dar una respuesta a la crisis de refugiados, y que esta cumbre no habría tenido lugar sin la presión de los ciudadanos angustiados por esta crisis y alarmados por la falta de respuesta institucional de los gobiernos.
En la comunicación de AI, su director en España, Esteban Beltrán, sostiene que «hace unos días, te informaba de la bochornosa decisión de los gobiernos de la Unión Europea de retrasar tres semanas la reunión para dar respuesta a esta crisis humanitaria. Y hoy me enorgullece contarte que, gracias a la presión de gente como tú y al trabajo de organizaciones como Amnistía Internacional entre otras, han rectificado» y añade que «tenemos una nueva oportunidad de conseguir por fin una respuesta humanitaria a la crisis».
Añade la organización que cada día llegan historias de familias que, tras huir de la guerra, se enfrentan en Europa a leyes injustas y a un trato degradante, por lo que «cada día que pasa sin que la Unión Europea actúe, es un día más que sumar al sufrimiento de su huida».
Amnistía Internacional ha podido obtener imágenes por satélite que muestran los esfuerzos frenéticos del gobierno de Hungría para repeler a los refugiados y solicitantes de asilo esta semana, y pide firmas para acabar con esta vergüenza: «Ya sabes que cuento contigo para difundir la petición», dice Esteban Beltrán, porque «nos enfrentamos a la mayor crisis humanitaria y de refugiados desde la II Guerra Mundial», en la que millones de personas huyen de situaciones inimaginables de violencia y abusos de derechos humanos en sus países de origen -desde bombardeos con bombas de barril y ataques con gas en Siria, a la tortura y la esclavitud en Eritrea.
En el último mes han sido varias las reuniones de autoridades de la UE y sus Estados Miembros para abordar la crisis de refugiados. Sin embargo, para Amnistía, el resultado de estas reuniones, y por tanto, la reacción de Europa, deja mucho que desear: «Cada reunión, cada día que pasa, es tiempo perdido para las miles de personas que necesitan urgentemente una solución a su situación», señala AI, porque «se necesitan actos, no palabras, para acabar con el sufrimiento de estas personas».
Desde enero de 2015, más de 411.000 personas, la mayoría de ellas refugiados, se han embarcado en peligrosas travesías en búsqueda de seguridad en Europa. Más de 2900 han muerto en el intento y «por desgracia, sus dificultades no cesan cuando logran alcanzar su destino. Esto es inaceptable».
El mayor impacto de esta crisis, sin embargo, no se deja sentir en España -ni tan siquiera en Europa-. Líbano alberga a más de un millón de refugiados provenientes únicamente de Siria, lo que equivale a un cuarto de su población. Países como Pakistan, Etiopía y Chad están dando acogida a poblaciones de refugiados en un número que debería avergonzar a la mayor parte de naciones europeas, agrega Amnistía.
Europa, y España como parte de la Unión, deben cumplir con sus obligaciones de derechos humanos. Los países europeos deben proporcionar una respuesta coordinada y efectiva a esta crisis, que garantice a los refugiados que llegan a Europa la bienvenida y el apoyo que les corresponde, concluye Esteban Beltrán.
