El Banco Mundial sostiene que 2015, fue un año de grandes logros, de tendencias emergentes y nuevos comienzos porque, entre otros indicadores, marcó «una caída histórica en la pobreza, un importante acuerdo sobre cambio climático y una baja en la mortalidad materna e infantil».
Para apoyar esta visión positiva de 2015, el Banco Mundial aporta los siguientes datos:
Tasa de pobreza mundial cae por debajo del 10 %
Se prevé que el porcentaje de la población mundial que vive en pobreza extrema caerá del 37,1 % en 1990 a un mínimo histórico de 9,6 % en 2015. Las nuevas estimaciones indican que 702 millones de personas viven por debajo de la nueva línea de pobreza mundial de USD 1,90 al día, y la mayoría de ellas habita en África al sur del Sahara y Asia meridional. Este logro fue calificado como la “mejor noticia del mundo en la actualidad” por el presidente del Grupo Banco Mundial, Jim Yong Kim, y constituye un avance real en los esfuerzos por poner fin a la pobreza extrema a más tardar en 2030.
Acuerdo mundial sobre el cambio climático
Representantes de 195 naciones firmaron el «histórico acuerdo de París contra el cambio climático el 12 de diciembre de 2015». Cada país se comprometió a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en lo que podría marcar un punto de inflexión en el esfuerzo mundial para frenar el cambio climático. El acuerdo reconoce la importancia de los mecanismos de incentivo para reducir las emisiones, entre ellos la fijación del precio del carbono.
En la actualidad, unos 40 países y 23 ciudades, estados y regiones ya cuentan con mecanismos de fijación del precio del carbono que cubren aproximadamente el 12 % de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero anuales. En el marco del acuerdo de París, más de 90 países desarrollados y en desarrollo han incluido la fijación del precio del carbono entre las medidas que se proponen adoptar.
El Grupo Banco Mundial trabaja con 130 países para ayudar a implementar un desarrollo “inteligente con relación al clima”, y aumentará las inversiones en financiamiento para el cambio climático a unos USD 29 000 millones anuales a fines de 2020, lo que representaría un incremento de un tercio con respecto a los niveles actuales.
Personas desplazadas por la fuerza llegan a una cifra récord
Las personas desplazadas por la fuerza llegan a más de 60 millones por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial. Más de la mitad de los 20 millones de refugiados en todo el mundo proviene de Siria, Afganistán y Somalia, y la mayoría encuentra refugio en naciones cercanas a sus países de origen.
El Grupo Banco Mundial, la Organización de las Naciones Unidas y el Banco Islámico de Desarrollo anunciaron en octubre que abordarían el empeoramiento de la crisis de los refugiados en Oriente Medio y Norte de África, mediante la emisión de nuevos bonos para recaudar miles de millones de dólares y ayudar a las personas desplazadas y apoyar la reconstrucción de la región devastada por la guerra.
En diciembre, el Programa Global sobre Desplazamiento Forzado hizo una convocatoria para la presentación de ideas que mejoren la respuesta en términos de desarrollo para los refugiados y los desplazados internos.
Metas ambiciosas para los ODS que deben lograrse en 2030
Logos de los ODSEn septiembre, los países del mundo se reunieron para ratificar un conjunto de 17 objetivos mundiales, conocidos como Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Las metas generales son poner fin a la pobreza extrema, combatir la desigualdad y la injusticia, y luchar contra el cambio climático. Los objetivos están asociados con una serie de nuevas metas e indicadores. Un estudio del Banco Mundial de comienzos de este año mostró que muchos países del mundo carecen de los datos para efectuar estimaciones confiables sobre las tendencias de la pobreza, y la institución se comprometió recientemente a llenar estos vacíos en la recopilación de datos en los países más pobres del mundo. En 2015 también se puso en marcha una alianza mundial denominada en inglésGlobal Partnership for Sustainable Development Data, cuyo fin es congregar a una diversidad de personas e instituciones para fomentar un mejor uso de los datos y la tecnología tanto en las tareas de monitoreo de los objetivos como en las tareas encaminadas a lograr los ODS.
Financiamiento para el desarrollo debe aumentar de miles de millones a billones
Los niveles de asistencia oficial para el desarrollo (AOD) o “ayuda externa” para los países en desarrollo ya son bajos en comparación con los flujos de recursos privados (como las remesas) y la inversión extranjera comercial. Los nuevos y ambiciosos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) requieren que se usen los “miles de millones” en AOD y en recursos de desarrollo disponibles para atraer, apalancar y movilizar “billones” en inversiones de todo tipo. Se espera que se sumen recursos de dos fuentes principales: los ingresos públicos nacionales (como los ingresos tributarios), donde se realiza el gasto de desarrollo más cuantioso, y el financiamiento y las inversiones comerciales, que son la mayor fuente potencial de fondos adicionales.
Se desploman los precios de los productos básicos
La caída de los precios de los productos básicos que se inició con los precios de los metales y de los productos agrícolas hace cuatro años —acompañados por el precio del petróleo crudo a mediados de 2014— continuó en 2015.
De acuerdo con Commodity Markets Outlook (Panorama sobre los mercados de productos básicos), los precios de la energía, los metales y los productos agrícolas se redujeron este año, en parte debido al aumento de la oferta, la abundante producción, la escasa demanda y un dólar estadounidense más fuerte.
Este fin del “superciclo de los productos básicos” llevará a los países exportadores de Oriente Medio, África, América Latina y Europa a ajustarse a una nueva normalidad, mientras que los países importadores como India se beneficiarán de la reducción de los costos.
Virus del Ébola deja un legado persistente
Un informe del Banco Mundial señaló que la pérdida de trabajadores de la salud a raíz del ébola afectará probablemente la mortalidad no provocada por el virus incluso después de que los países se declaren libres de la enfermedad. Por ejemplo, la mortalidad materna podría aumentar en un 38 % en Guinea, un 74 % en Sierra Leona, y un 111 % en Liberia, porcentajes vistos por última vez en estos países hace 15 a 20 años.
El informe indicó que el ébola debilitó los sistemas de salud ya muy frágiles de estos países. Para mayo de 2015, Liberia, Sierra Leona y Guinea habían perdido el 8,07 %, el 6,85 % y el 1,45 %, respectivamente, del total del personal sanitario de cada país, siendo estas tasas mucho más altas que la mortalidad entre las poblaciones generales de estas naciones.
Más del 60 % de las economías del mundo mejoran reglas empresariales
En la edición de Doing Business de 2016 se identificaron 231 reformas que permitieron mejorar la actividad empresarial en 122 países de todo el mundo. Por ejemplo, los datos de los últimos 12 años muestran que en 2003, abrir una nueva empresa tomaba 51 días en promedio a nivel mundial. Este tiempo se ha reducido más de la mitad, llegando a 20 días.
Además, los datos muestran signos alentadores de convergencia hacia las mejores prácticas, puesto que las economías de bajos ingresos han mostrado más mejorías que las economías de altos ingresos a lo largo del tiempo.
El caso de Mozambique ilustra esta tendencia. En 2003, un emprendedor tardaba 168 días en abrir una empresa, pero ahora solo tarda 19 días.
Cambios demográficos dan forma al futuro
Si bien la proporción de la población mundial en edad de trabajar alcanzó su punto máximo al llegar a 66 % en 2012, algunas partes de África y Asia experimentan un aumento de su población en edad de trabajar, y los países de estas regiones tienen una oportunidad para lograr una mayor prosperidad y mejores niveles de vida.
De acuerdo con el Informe de seguimiento mundial de 2015, África al sur del Sahara será responsable de más de la mitad del crecimiento de la población mundial en edad de trabajar hasta 2050. Se prevé que la población mundial llegue a 9700 millones de habitantes en 2050, y casi la mitad del crecimiento de la población se producirá en solo nueve países.
Tasas de mortalidad materna e infantil caen a niveles sin precedentes
Entre 1990 y 2015, las tasas de mortalidad materna y de niños menores de 5 años descendieron en un 44 % y un 53 %, respectivamente. Esto significa que la cantidad de niños que mueren antes de los 5 años se ha reducido drásticamente, de 12,7 millones en 1990 a 5,9 millones en 2015.
Millones de niños han sobrevivido debido al uso de tipos de intervenciones basadas en pruebas contra las principales enfermedades infecciosas, tales como los mosquiteros tratados con insecticida, el tratamiento de rehidratación para la diarrea, los suplementos nutricionales y los alimentos terapéuticos.
Sin embargo, a pesar de estos avances, se estima que 16 000 niños menores de 5 años siguen muriendo cada día y casi la mitad de estas muertes son atribuibles a la desnutrición.
Al 40 % más pobre de la población le va mejor
El aumento de los ingresos en la última década ha ayudado al 40 % más pobre de la población de muchos países. Teniendo en cuenta un periodo de cinco años aproximadamente a partir de 2007 y finalizando alrededor de 2012, los ingresos del 40 % más pobre de la población crecieron en 65 países de los 94 países que cuentan con datos adecuados y comparables.
Entre ellos, 47 países registraron una “prima de prosperidad compartida”, debido a que los ingresos del 40 % más pobre de la población crecieron más rápido que los ingresos de la población promedio, reduciendo así la desigualdad de ingresos entre estos grupos.
Restricciones legales afecta a las trabajadoras
El informe Mujeres, Empresas y el Derecho de 2016 señala que 155 de 173 economías tienen al menos una ley que impide el acceso de las mujeres a las oportunidades económicas.
En 100 economías, las mujeres enfrentan restricciones de empleo basadas en el género. En estas economías, las mujeres no tienen el mismo acceso a las mismas actividades económicas que los hombres y, en algunos casos se les prohíbe ocupar determinados puestos de trabajo, sobre todo en industrias con sueldos elevados.
El informe también indica que las restricciones laborales que afectan a las mujeres reducen su potencial de ingresos respecto de los hombres.