La otra cara del mito americano en busca de una Palma de Oro
En competición una coproducción franco norteamericana, «The Homesman», dirigida e interpretada por Tommy Lee Jones. Luc Besson es el coproductor francés de esta singular mirada sobre la otra cara del mito americano del farwest, con lectura moderna y universal. Adaptación a la pantalla de una novela de Glendon Swarthout, un especialista en la historia del oeste americano, cuyas novelas han sido a menudo adaptadas para el cine.
Nueve años después de su primera película como realizador “Los tres entierros de Melquiades Estrada», galardonada en Cannes 2005 con los premios de mejor guión para el mexicano Guillermo Arriaga y de mejor intérprete masculino para Tommy Lee Jones, el afamado director y actor norteamericano vuelve a la competición oficial de Cannes, dispuesto a llevarse esta vez la Palma de Oro. Pero en esta ocasión son tres locas, un hombre, una mujer y una sola tumba.
Quedan todavia muchas películas por ver en esta competición, pero no cabe duda desde ya, que la de Tommy Lee Jones se encuentra cuando llegamos a la mitad del festival, en cabeza de esa avanzadilla destacada del pelotón de aspirantes a una Palma, o en todo caso a un lugar destacado en el Palmarés.
Sus intérpretes son excelentes, tanto protagónicos como secundarios. El propio Tommy Lee Jones en el papel de un viejo desertor trotamundos libre como el viento y sobre todo la protagonista femenina Hilary Swank, actriz y productora que tiene aquí su mejor papel desde «Million dolar baby» de Clint Eastwood, y que se apunta ya como favorita a mejor actriz.
El guión es sólido, ingenioso y original, pues Tommy Lee Jones y sus coguionistas Kieran Fitzgerald y Wesley Oliver, revisitan los códigos de ese género tan trillado para oferecernos una especie de anti-western, en el que el viaje no es el de la tradicional conquista del oeste, sino que la diligencia va de regreso del oeste al este para llevar a buen puerto su demente cargamento; los indios que contribuyen al suspense son de fugaz aparición y se dejan convencer o comprar fácilmente; la caravana es una especie de cajón o prisión con rejas y en lugar de transportar ganado, se trata de conducir de nuevo a la civilización, representada por el este, a tres pobres mujeres dementes y violentas.
Sus brillantes diálogos manejan con mucho talento el humor y la ironia, cuando la solterona granjera Mary Bee Cuddy, interpretada por Hilary Swank, obsesionada por encontrar marido lanza de golpe y porrazo a su invitado: «el queso está muy bueno,¿que le parece si nos casamos?». O un final de antología en donde el viejo cowboy pide a la joven sirvienta que se case con él y le dice : «sobretodo no te vayas a la conquista del oeste en busca del dorado». Brillante conclusión que cierra lo que podemos calificar como la otra cara del mito americano.
El tema de la locura de esas mujeres en los áridos paisajes del oeste en 1850, el carácter brutal y primitivo de sus personajes, la miseria en que viven y las creencias religiosas de los pioneros de esa conquista , o ese viaje iniciático en diligencia que va a modificar el comportamiento de sus personajes, al término de inesperadas vicisitudes, sirven a Tommy Lee Jones para dar a su relato una lectura universal y contemporánea, mostrando las taras congénitas y la violencia propia al nacimiento de la Nación americana. Un gran momento de cine en este festival de Cannes.